VALÈNCIA (VP). La próxima semana una delegación del Ayuntamiento de València se desplazará a Madrid para reunirse con el Ministerio de Fomento. La cita ha sido acordada tras el pleno del pasado mes de octubre en el que los partidos que componen el Govern de la Nau rechazaban la ampliación, e instaban al Ministerio de Fomento a mantener esa inversión en el territorio valenciano pero centrándose en el transporte público.
A la cita, el alcalde de València, Joan Ribó, sabe que irá sin apoyo de uno de sus socios de gobierno, València en Comú. La formación emitió este jueves un comunicado en el que considera que la reunión prevista para el próximo 10 de mayo con el Director General de Carreteras y representantes del Ayuntamiento de Valencia no respeta el acuerdo del pleno.
La formación, vinculada a Podemos, critica la contrapropuesta del alcalde al considerar que no está respaldada ni por técnicos ni por los colectivos sociales afectados por la ampliación. "No hay un proyecto serio, ni ningún técnico que lo avale", enumeraban desde ValC. "La propuesta no está apoyada ni por el Ayuntamiento de Alboraia ni por la Consellería. No posee el apoyo de los colectivos sociales afectados por la ampliación. Carece de participación ciudadana, no se ha expuesto públicamente para que pudiese ser debatida por la población".
Desde el grupo municipal que lidera María Oliver solicitaban una inversión más acorde con el modelo de movilidad impulsado por el Govern de la Nau. Igualmente criticaban que las resoluciones del pleno deben ser respetadas, y por tanto, decían, no tiene mucho sentido presentar una propuesta alternativa, y más una vez adjudicado el proyecto.
Desde ValC insistían también que este proyecto "depredará 80.000 metros cuadrados de huerta que están dentro de la denominación de origen de la Chufa de València y que se encuentran actualmente produciendo". También consideran que esta ampliación choca frontalmente con el Plan de Acción Territorial de l’Horta y con la Ley de l’Horta. Es más, tras estudiar la propuesta presentada por el alcalde para modificar el proyecto de ampliación de la V-21, la agrupación considera que la propuesta de Ribó, apoyada por el PSOE, "llega tarde y es poco valiente respecto al modelo de infraestructuras sostenibles".
Para la formación morada, esta alternativa, al igual que el proyecto aprobado por el Ministerio de Fomento, "deja abierta la puerta para la futura ampliación del acceso norte [del Puerto de València]", una infraestructura que califican de "faraónica" y de "totalmente innecesaria para la ciudad y para el Puerto". Desde su punto de vista, este "modelo depredador de desarrollo" no pretende otra cosa que reactivar la burbuja de las obras públicas, "con proyectos innecesarios que destrozan nuestro territorio y empobrecen a nuestra población y a nuestras instituciones".
"Necesitamos que las inversiones en nuestra comunidad reviertan en la mejora de la vida de las personas no en fantasías y ocurrencias de los mismos que casi nos arruinan hace unos años. Para que esto se dé, el Estado debe escuchar la voz de los Ayuntamientos, pero ya sabemos que este Gobierno por regla general escucha poco, o nada", concluye el comunicado.