VALÈNCIA. Valencia Innovation District - candidatura liderada por Startup Valencia para la gestión de la antigua Estación Marítima en la Marina de València - se marca el verano de 2023 como objetivo de apertura del espacio, en el que se pretende albergar un hub tecnológico. Así lo apunta Juan Luis Hortelano, presidente de Startup Valencia, tras conocerse que la inicial adjudicataria -Fosbury & Sons- ha retirado el recurso sobre la sentencia que anulaba el proceso y descartaba su oferta por no ajustarse a los pliegos.
"Nos gustaría estar allí para el verano de 2023. Sabemos que la sentencia es firme pero ahora depende de cuestiones administrativas. Si todo el mundo apoya y se dan las circunstancias, creo que podríamos estar allí en ese plazo", destaca. Hortelano asegura que, todo lo presentado hace cuatro años en su oferta, sigue en vigor. "Han pasado tres años desde que se inició el proceso y habrá que retomar con los socios si alguno quiere salir. Pero lo más urgente es el terminar de cerrar la situación con el Consorcio Valencia 2007 y ver los siguientes pasos", señala.
La inversión de Valencia Innovation District para poner en funcionamiento el espacio, según señalaban, superará los 3 millones de euros. Tras su apertura, el hub tecnológico albergará más de 500 puestos de trabajo de alta cualificación. En este sentido, estimarán que más de 5.000 profesionales de la innovación y tecnología participarán anualmente en las actividades y eventos de formación y networking así como en los programas de innovación abierta que las corporaciones e instituciones desarrollen en este hub tecnológico.
"Tenemos que ver cómo ha quedado la Marina de Valencia con lo que ha hecho Fosbury y si hay que replantear algo del proyecto, pero el objetivo es acelerar y cuanto antes estar allí", insiste. Entre los actuales socios de la sociedad se encuentran reconocidos perfiles del sector emprendedor valenciano como Ángela Pérez, de Health in Code -antigua Imegen-, Iker Marcaide, fundador de Zubi Labs o Enrique Calabuig.
Sobre qué ha supuesto para el ecosistema emprendedor estos cuatro años de proceso estancando, el presidente de Startup Valencia reconoce que ha significado no tener un espacio agregador, además de el canon que ha dejado ingresar la Marina de Valencia de 190.000 euros todos los años. "Son cuatro años perdidos que startups en los que compañías querían instalarse en la Marina de València buscaban alternativas pero miraban de reojo", recalca. "El lugar es ideal, también se irá Big Buy en unos meses, y está todo el mundo apostando por el lugar como el foco de startups e innovación".
