Ribó accede a mantener dos zonas liberalizadas y el gran comercio renuncia a los recursos

VALENCIA. Suele decirse que los mejores acuerdos son aquellos en los que ninguna de las partes resulta plenamente satisfecha. Si se atiende a ese criterio, el Ayuntamiento de Valencia y los representantes del sector comercial llegaron este martes a un gran acuerdo a medio camino entre la propuesta municipal de reducir al mínimo la liberalización comercial en la capital y la de las grandes empresas de mantener las cinco zonas aprobadas en 2013. El resultado es que la calle Colón y el entorno de la Ciudad de las Artes y las Ciencias se mantendrán como zonas liberalizadas, tal y como solicitaban las asociaciones de consumidores.

El pacto alcanzado en el seno del Consejo Local de Comercio pone fin a meses de enfrentamiento entre el gobierno municipal, que se había posicionado al lado de un sector del pequeño comercio para reducir de cinco a una las zonas declaradas como de gran afluencia turística (ZGAT) con libertad horaria, y las grandes superficies, que habían planteado mantener el statu quo a golpe de recurso si no se adoptaba una solución que suscitase un mínimo consenso.

Y así fue. El Ayuntamiento cedió en su postura de mantener una única zona turística en el perímetro de la Lonja, que en la práctica implicaba dejar fuera a todas las grandes superficies que en la actualidad gozan de permiso para abrir domingos y festivos. Mientras que las grandes empresas representadas en Anged accedieron a que finalmente sean dos las zonas liberalizadas: Ciutat Vella, incluidos los dos márgenes de la calle Colón y el entorno de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, donde se ubican los centros comerciales Aqua, El Saler y El Corte Inglés.

Del mapa definitivo quedan fuera la Marina Real y sus accesos, el entorno del estadio del Levante UD, la avenida de Cortes Valencianas -liberalizada tras un recurso judicial- y el Jardín del Turia. Anged trasladó la semana pasada una contrapropuesta en la que proponía sumar también esta última zona a las dos áreas que finalmente se mantendrán intactas.

"La mejor de las peores soluciones"

El representante de esta asociación, Carlos Alfonso, lo resumía de este modo: "es la mejor de las peores soluciones". A cambio, aseguró que su asociación renuncia a plantear recursos judiciales en Valencia para pelear por los centros que se quedan fuera. No sucede lo mismo en Alicante, donde el Ayuntamiento actuó de espaldas al sector y las grandes empresas ya han iniciado la vía judicial.

El segundo compromiso de Anged, el que más influyó en el cambio de postura del gobierno municipal, fue el de mantener los empleos que, según los operadores ha generado la ampliación de horarios comerciales. Según advirtieron, revertir la situación podría provocar la pérdida de 800 puestos de trabajo en Valencia.

Con el acuerdo de este martes, según explicó Carlos Alfonso, las empresas tienen una vía para recolocar a los empleados de las tiendas que se verán obligadas a cerrar en domingo en aquellas que podrán seguir haciéndolo. No obstante, insta a los sindicatos a "colaborar".

Por su parte, el concejal de Comercio, Carlos Galiana, detalló que también existe el compromiso de que los empleados del comercio pasarán de poder trabajar un máximo de 52 festivos al año a "como mucho" entre 12 y 14.

Un consenso mayoritario, pero no total

El acuerdo suscitó un consenso mayoritario, pero no total. La propuesta se ajusta a lo defendido por las asociaciones de consumidores más representativas (Tyrius, Unión de Consumidores y Avacu). Aunque no hubo votación como tal, los representantes sindicales, los mercadillos y Unión Gremial validaron la propuesta de consenso, aunque defendían una postura más restrictiva. La misma actitud mantuvo Anged y la representación del PP, pero por motivos opuestos.

El resto de asociaciones mostró su satisfacción por un acuerdo que no pocos califican de "histórico", ya que hace apenas unos días se antojaba imposible llegar a un punto de equilibrio. Carlos Galiana destacó que nunca antes se había llegado a un pacto de este tipo. "El PP lo había desechado -en alusión al consejo de comercio- porque pensaba que era inoperante, cuando los inoperantes eran ellos por no convocarlo", lamentó.

El argumento básico para defender la postura pactada es la suficiente presencia de plazas hoteleras en las dos zonas acordadas como para respetar su consideración de zonas de gran afluencia turística.

A partir de ahora, la concejalía de comercio llevará la propuesta a la junta de gobierno local para su aprobación y, posteriormente, será elevada a la Dirección General de Comercio de la Generalitat para que haga lo propio.

En el acuerdo las partes comprometen también a que el 19 de marzo (Día de San José), el Primero de Mayo, el 9 d'Octubre y el día de Navidad permanezcan cerrados los centros comerciales en Valencia por ser "días significativos".