De aeropuerto a parque: València se inspira en un proyecto chino para transformar el circuito de F1

VALÈNCIA. El Ayuntamiento de València pretende reconvertir el antiguo circuito urbano de Fórmula 1 a su paso por el sector del Grao en un circuito "biosaludable" peatonal para la práctica del deporte. Una transformación que obligará a reutilizar el trazado que ahora es asfalto para un nuevo uso totalmente diferente para el que se construyó inicialmente: si antes discurrían bólidos a elevada temperatura, en un futuro lo harán runners. Así pues, se trata de una actuación para la que el consistorio ya busca ideas que copiar o imitar.

La empresa pública encargada del planeamiento urbanístico, Aumsa, ya trabaja en ese sentido. Tiene en el punto de mira una de las actuaciones más innovadoras en este campo, que se llevó a cabo en China con la transformación de un aeropuerto en un jardín transitable y verde. Salvando las enormes diferencias entre ambos proyectos -de aviones a familias; de automóviles a deportistas-, hay aspectos que pueden ser de aplicación en el caso del barrio marítimo del Grao.

La iniciativa, desarrollada por el estudio de arquitectura Sasaki y ganadora de hasta una decena de premios del ramo de nivel internacional, se encargó de urbanizar así un parque lineal sobre las pistas de aterrizaje del aeropuerto de Longhua (Shanghai), cerrado en 2011. "Planificado como una calle pública y un parque lineal uno al lado del otro, este proyecto sirve como una pasarela de la vida moderna", explica el equipo redactor.

En aquel caso, al ser el origen una pista de aviación, se buscó "reflejar la historia previa" del lugar con un diseño que "imita el movimiento de una pista, creando diversos espacios lineales para vehículos, bicicletas y peatones". De esta manera, se creó un bulevar a "escala humana" con hileras de árboles y diferentes zonas de flores "creando un clima confortable" y "efectos estacionales". Y se situó alrededor una zona comercial.

En el caso de València, la concejala impulsora del planeamiento, Sandra Gómez, ya ha adelantado que no se pretende crear una zona de atractivo comercial en este sector, sino una área residencial que integre espacios de uso terciario innovador donde puedan instalarse empresas tecnológicas de gran valor, aprovechando la proximidad del Grao con La Marina y otros espacios como La Harinera, futuro centro innovador del Ayuntamiento.

Se desconoce por ahora cómo podría adaptarse el asfalto pensado para el circuito de Fórmula 1 a una senda "biosaludable" para las personas. Gómez apuntó al proyecto definitivo para conocer estos detalles. En Shanghai, por ejemplo, el nuevo parque integró porciones de la antigua pista original para intentar "mantener la memoria del sitio", de manera que reutilizó parte del asfalto para que sirviera como camino peatonal, conservando incluso las marcas de dirección originales.

También se reutilizaron piezas de hormigón de la anterior construcción para otros elementos del proyecto como la elaboración de un pavimento aleatorio que discurre de manera paralela al camino principal, donde la gente puede descansar y buscar refugio del sol. Unos reciclajes que, según los diseñadores, no sólo ahorró costes económicos sino que también evitó más emisiones de gases en la elaboración de un nuevo pavimento.

Ciertamente, como señaló Gómez, la idea del circuito "biosaludable" todavía no se ha concretado en un diseño concreto. Tampoco cómo serán las zonas verdes, cuya organización y disposición tendrá que ser objeto de un proyecto propio y diferenciado del planeamiento urbanístico más adelante. Ahora bien, experiencias como las de China se están utilizando desde el consistorio para inspirar la recuperación del antiguo circuito de Fórmula 1, ahora convertido en un desierto de asfalto atacado por la degradación.