VALÈNCIA. El acceso al puerto de Gandia cambiará por completo con un proyecto que reorganizará el cruce entre la avenida de La Pau y el paseo marítimo de Neptuno para dar prioridad al paso de peatones y ciclistas frente al tráfico rodado. Así figura en el expediente que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) ha sacado a exposición pública este miércoles, y que afecta a uno de los puntos más transitados del litoral urbano de la ciudad.
La actuación, con un presupuesto de 69.942,49 euros, tiene como objetivo resolver los conflictos de uso que se producen en el entorno del Club Náutico y el aparcamiento subterráneo, ordenando los accesos y facilitando un uso más racional del espacio público. Se trata de un tramo en el que confluyen el paseo marítimo, una vía rodada de acceso al puerto, zonas de estacionamiento y espacios peatonales, en un contexto de alta ocupación estacional y presión urbana.
Con esta intervención, el Ministerio plantea una redistribución del espacio que limite el paso de vehículos privados y potencie la movilidad activa. El tráfico motorizado se reducirá al mínimo imprescindible: solo podrán acceder los residentes, los servicios de emergencia, los usuarios del aparcamiento subterráneo y los del Club Náutico. El resto del espacio se reorganizará para mejorar la accesibilidad, ampliar las aceras y habilitar recorridos ciclistas seguros y continuos.

- Ámbito de actuación en la avenida de La Pau en Gandia. -
- Foto: MITECO
El proyecto se enmarca dentro del proceso de transformación urbana de la avenida de La Pau, una de las principales vías de entrada al puerto y a la playa. Aunque la actuación es puntual, se considera estratégica por su ubicación y por el efecto de "cosido urbano" que puede generar, al conectar espacios fragmentados y mejorar la relación entre la ciudad y su fachada litoral. El Ayuntamiento de Gandia, que no es el promotor del proyecto pero sí colabora en su desarrollo, ya ha manifestado su voluntad de recuperar espacio para el peatón y revalorizar esta zona como espacio público de calidad.
Cabe destacar que el ámbito de actuación se encuentra dentro del dominio público marítimo-terrestre, regulado por la Ley de Costas. Según el deslinde vigente, cualquier intervención en esta zona requiere de la autorización del Miteco, que ahora abre un periodo de exposición pública para que ciudadanos, entidades o administraciones presenten alegaciones al plan.
Ordenación respetuosa y soluciones poco invasivas
Uno de los elementos más destacados del proyecto es su enfoque ambiental y paisajístico, ya que, según se detalla en el documento, "el diseño se adapta a la morfología del litoral y pretende resolver la desconexión física entre el paseo y la playa". Por otra parte, la actuación servirá para "responder a los efectos del cambio climático", así como al retroceso de la línea de costa, mediante una ordenación respetuosa con el sistema dunar y soluciones poco invasivas.
En paralelo, el plan responde a los principios de adaptación al cambio climático, ya que forma parte de una estrategia más amplia orientada a reducir la presión sobre el litoral, minimizar el impacto del tráfico rodado y mejorar la resiliencia del borde urbano costero. Aunque no se trata de una obra de regeneración ambiental ni de intervención directa en ecosistemas naturales, sí se plantea como una ordenación compatible con los valores paisajísticos y funcionales de la zona.
Si el expediente recibe el visto bueno tras el periodo de alegaciones, la actuación podrá ejecutarse en coordinación con el Ayuntamiento, que ya ha manifestado en otras ocasiones su voluntad de recuperar para la ciudadanía este tramo de contacto entre la ciudad, el mar y la naturaleza.