VALÈNCIA. Más de un mes después del inicio del curso, decenas de aulas de música y danza en la Comunitat Valenciana siguen vacías. Los retrasos en la contratación del profesorado especialista por parte de la Conselleria de Educación han dejado a alrededor de 150 alumnos sin clases en los conservatorios profesionales y superiores, según los últimos cálculos del sindicato UGT. En el arranque de septiembre, la cifra superaba los 400 estudiantes afectados, una situación que ha ido reduciéndose conforme se adjudicaban las plazas pendientes.
Esta situación, según explican fuentes sindicales a Valencia Plaza, afecta a 28 conservatorios de titularidad autonómica, entre ellos el de Torrent y el Conservatorio Superior de Música de València, donde aún faltan docentes en materias como Escena lírica o Caracterización. Estas asignaturas, esenciales para los proyectos operísticos del centro, se encuentran paralizadas "por falta de profesorado o por haberse suprimido temporalmente por razones de ratio".
La raíz del problema se remonta al pasado mes de mayo, cuando la Conselleria de Educación convocó un nuevo concurso de méritos para crear bolsas de trabajo de profesorado especialista en enseñanzas artísticas, de idiomas y deportivas. Este procedimiento debía renovar las listas de contratación y adaptar los criterios a la nueva Ley de Enseñanzas Artísticas Superiores, pero su ejecución coincidió con la tramitación del Decreto 97/2025, de 25 de junio, que regula por primera vez el régimen laboral de estos docentes.
Hasta el momento, el profesorado especialista -profesionales del sector artístico que imparten materias muy técnicas o escénicas- trabajaba mediante contratos administrativos de interinidad. El nuevo decreto convierte esas relaciones en contratos laborales, lo que implica un cambio total en la gestión de altas, baremación y nóminas.
- Conservatorio Superior de Música de València. - Foto: GVA
Además, establece que los especialistas no ocuparán plazas reservadas a funcionarios y que sus retribuciones se calcularán por horas lectivas, a las que se suma un 20% por preparación y evaluación. En la práctica, el cambio ha exigido rehacer todos los procedimientos de contratación y coordinación entre el Instituto Superior de Enseñanzas Artísticas (Iseacv) y la Dirección General de Personal Docente, que todavía no han resuelto la totalidad de los contratos.
La aplicación simultánea de ambas normas ha generado un "colapso administrativo". Los nuevos contratos, más complejos y sometidos a comprobaciones adicionales, han demorado la incorporación de decenas de docentes interinos. Muchos de ellos, según UGT, son "especialistas históricos" que llevaban hasta veinte años impartiendo clase y que este curso se han quedado fuera de las listas o sin destino asignado.
Un inicio de curso improvisado
Además, el sindicato denuncia que la nueva fórmula contractual implica una reducción retributiva que puede alcanzar el 40%, al eliminar complementos específicos del personal docente funcionario. Por su parte, la normativa aprobada por la Conselleria justifica el cambio en la necesidad de ajustar el sistema de contratación a los principios de igualdad, mérito y capacidad, en línea con la legislación estatal y con el objetivo de garantizar una gestión homogénea del profesorado especialista en todo el territorio.
Mientras tanto, en los conservatorios el curso avanza entre improvisaciones. Por ejemplo, en el Conservatorio Profesional de Torrent, tres especialidades siguen sin cubrirse y, en otros centros, las adjudicaciones de jornada parcial no llegaron hasta finales de septiembre, lo que obligó a reorganizar horarios y reducir la oferta de forma temporal.
Fuentes sindicales reconocen que el impacto en el alumnado "es evidente": desde proyectos suspendidos hasta evaluaciones atrasadas y una pérdida de continuidad pedagógica en especialidades tan prácticas como la interpretación instrumental o la danza. Estas mismas fuentes aseguran que, tras haber remitido las quejas al Iseacv y al Servicio de Ordenación de Enseñanzas Especiales (Sogere), todavía no han obtenido respuestas "ni un calendario claro" para la formalización de los contratos pendientes.
Pese a ello, la Conselleria de Educación sostiene en sus comunicaciones oficiales que el curso ha arrancado "con normalidad y con cifras récord de contratación", un mensaje que contrasta con la realidad de los conservatorios. Para los docentes, esta situación es la prueba de una "precariedad estructural" que arrastra el sistema de enseñanzas artísticas desde hace décadas y que el nuevo modelo, lejos de resolver, ha agravado el problema.
