VALÈNCIA. La ampliación del polígono industrial La Taronja, en Picanya, incorporará más de 102.000 metros cuadrados de suelo, situados al suroeste del municipio y colindantes al término de Torrent, para crear un nuevo sector destinado a empresas logísticas y manufactureras. En mayo, el ayuntamiento aprobó modificar el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), que reclasifica el área como suelo urbanizable industrial sectorizado, con la premisa de ampliar la oferta de espacios productivos en una localidad donde apenas queda terreno disponible para nuevas actividades económicas. 

El acuerdo salió adelante con los votos favorables del PSPV, Partido Popular (PP) y Vox, mientras que los tres concejales de Compromís expresaron su "preocupación" por el momento elegido para su tramitación. "Los informes de inundabilidad que se incorporan a la modificación son anteriores a la Dana del 29 de octubre y las circunstancias del entorno han cambiado", argumentó el portavoz de la coalición, Guillem Gil. 

Por otra parte, Gil criticó "la falta de contacto con los propietarios afectados" y reclamó que "el proceso de participación se hubiera hecho antes y con más transparencia". Desde el equipo de gobierno, el segundo teniente de alcalde, Guillem Tortosa, aclaró que la inclusión de dicha modificación del PGOU en el orden del día respondía a "continuar un procedimiento iniciado hace tiempo. Si no hubiera ocurrido la Dana, ya se habría aprobado”. En su opinión, “es importante mantener los plazos previstos para ordenar el crecimiento industrial de forma coherente".

Necesidad de suelo industrial en Picanya

En concreto, la actuación prevé la creación de una parcela industrial principal de 36.782 metros cuadrados, rodeada por un vial perimetral de dos carriles y conectada al resto del polígono La Taronja mediante la calle de Orihuela y la glorieta dels Llauradors, junto a las carreteras CV-33 y CV-36. Además, el plan incluye zonas verdes, un parque público y reserva suelo para un centro de transferencia de residuos, cumpliendo con lo establecido en el Plan Integral de Residuos de la Comunitat Valenciana. 

El Estudio Ambiental y Territorial Estratégico, redactado en diciembre de 2024, justifica la modificación por la escasez de suelo industrial en el municipio. En la actualidad, solo queda una parcela vacante de 9.000 metros cuadrados, al mismo tiempo que la demanda de suelo logístico en la comarca de l'Horta Sud sigue creciendo. Según el informe, la ubicación de Picanya, a menos de diez kilómetros de València y con acceso a la red metropolitana de transporte público, convierte al municipio en un punto atractivo para la actividad económica. 

En materia ambiental, el estudio identifica el ámbito como suelo no urbanizable común de baja erosión y sin riesgos geotécnicos, aunque parcialmente afectado por las zonas de inundabilidad definidas por el Patricova. Para mitigar el riesgo, se prevé un sistema de drenaje sostenible, medidas de protección de la calidad del agua y del aire, control del ruido y polvo durante las obras y un programa de seguimiento ambiental que abarcará tanto la ejecución como la fase de funcionamiento.

La planificación se enmarca en los objetivos de la Estrategia Territorial de la Comunitat Valenciana (ETCV), que promueve un crecimiento industrial racional y vinculado a infraestructuras sostenibles. Asimismo, se ajusta al Plan de Acción Territorial de la Huerta de València (PATHV), que permite nuevos usos industriales solo en zonas rurales comunes y como ampliación de polígonos ya existentes, condición que cumple este sector.

El acceso peatonal al área estará reforzado por su cercanía a la estación de metro de Picanya, a menos de cinco minutos a pie, lo que permitirá fomentar la movilidad sostenible de los trabajadores. Mientras tanto, la modificación permanecerá en exposición pública durante 45 días hábiles, periodo en el que vecinos y entidades podrán presentar alegaciones.