VALÈNCIA. El riesgo de expansión de la gripe aviar en las explotaciones avícolas ha llevado al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación a ampliar las medidas de protección ante la enfermedad a todo el territorio nacional, de manera que la totalidad de granjas de la Communitat Valenciana deberán adoptar los protocolos de prevención, entre los que se incluye el confinamiento de las aves criadas al aire libre. En total, 457 explotaciones valencianas se ven obligadas a confinar sus gallinas como medida de prevención, mientras que por lo pronto ninguna ha registrado ningún caso de contagio en aves destinadas al consumo.
Tal y como han confirmado desde la Conselleria de Agricultura, la decisión del Ministerio implica que la resolución de 30 de octubre de 2025, de la Dirección General de Producción Agrícola y Ganadera, que establece las medidas de protección ante la influenza aviar en la Comunitat Valenciana pasa a ser de obligado cumplimiento no sólo en 138 municipios que inicialmente se incluyeron en el listado de zonas afectadas sino en toda la región.
Se trata de una medida de refuerzo de la prevención ante el riesgo de propagación de la enfermedad de la que se han contabilizado 14 focos en explotaciones de toda España, la mitad de ellos en Castilla y León, además de 53 en aves silvestres y 5 en cautivas, según datos del Ministerio.
En la Comunitat, la conselleria confirma que no se ha detectado ningún caso en granjas -únicamente un caso en un establecimiento de aves en cautividad y presencia del virus en aves silvestres en humedales- y se insiste en remarcar el mensaje de tranquilidad y de confianza en el cumplimiento de las medidas de bioseguridad. Unos protocolos que deberán ser aplicados por todas las explotaciones avícolas.
Según las estadísticas del informe agrario de la Comunitat, en la provincia de Castellón existen, a fecha de diciembre de 2024, un total de 457 granjas avícolas, de las que 330 se dedican a la cría de broiler, 48 a la cría de gallinas y 79 a la producción de huevos para consumo. En total, se contabilizan más de 22 millones de plazas de ganado avícola en las explotaciones en la Comunitat.
Tranquilidad en el sector
Desde la Unió Llauradora i Ramadera, su responsable técnico de ganadería, Francis Ferreres, ha calificado de manera positiva la ampliación de las medidas de bioseguridad porque "van en la línea de no bajar la guardia y de evitar que la enfermedad pueda afectar al sector avícola, que en la provincia de Castellón tiene una presencia importante". En este sentido, Ferreres recuerda que "estamos en un momento de gran movimiento de aves migratorias" y la Comunitat "además de contar con espacios de parada para estas aves, como a Albufera de Valencia, tiene al norte el Delta del Ebro, por lo que existe un riesgo claro de que estas aves puedan transmitir el virus".
Para Ferreres es bueno que adopten medidas de protección ya que, además, "contamos con explotaciones avícolas que ya están muy preparadas para hacer frente a este tipo de riesgos de bioseguridad" y "lo más importante es evitar cualquier riesgo de foco porque implicaría importantes pérdidas".
Por su parte, Ximo Gómez, técnico y veterinario de AVA-ASAJA, también ha lanzado un mensaje de tranquilidad ante unas medidas preventivas que son "normales" en este momento de migración de aves y ha insistido en que las explotaciones avícolas de la Comunitat cuentan con "excelentes medidas de bioseguridad" y están "totalmente preparadas" para hacer frente a esta situación de alerta.
Cabe recordar que la Conselleria de Agricultura había fijado a través de una resolución las medidas complementarias de prevención frente a la gripe aviar, que ahora son aplicables a todas las explotaciones, con la prohibición de la cría conjunta de patos y gansos con otras especies, así como la cría de aves de corral al aire libre.
También se veta el uso de agua de depósitos accesibles a aves acuáticas y la participación de aves en ferias, certámenes o celebraciones culturales. Las explotaciones deberán extremar las medidas de bioseguridad y comunicar de inmediato cualquier sospecha o hallazgo de aves muertas a los servicios veterinarios oficiales. Además, se prevé implantar programas de vacunación preventiva en los parques zoológicos de la Comunitat Valenciana.