VALÈNCIA. La crisis abierta en el PSOE a raíz de las nuevas relevaciones en el 'caso Koldo' conlleva una serie de consecuencias colaterales que afectan a los distintos territorios.
Tal y como informó este diario, el estallido informativo que ha supuesto el informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil sobre el ya ex secretario de Organización de la formación socialista, Santos Cerdán, ha debilitado la posición del PSPV frente al presidente de la Generalitat, Carlos Mazón.
Pero esta no es la única consecuencia. En los últimos meses, había crecido la distancia entre el PP y Ens Uneix, formación liderada por el exsocialista Jorge Rodríguez, pese a que actualmente conforman una alianza en la Diputación de Valencia.
Así, especialmente a raíz de la Dana y de otras discrepancias, como la aprobación de los presupuestos autonómicos de Mazón con diversas concesiones a Vox, aumentó la distancia de Ens Uneix respecto a la formación popular y, en consecuencia, con su socio el presidente de la Diputación, Vicente Mompó.
Es por ello que creció el 'runrún' sobre una posible moción de censura. Cabe recordar que el PP consiguió gobernar esta institución gracias al acuerdo alcanzado con Ens Uneix en 2023, si bien la única representante de este partido en la corporación, la ahora vicepresidenta de la Diputación Natàlia Enguix, posee el voto decisivo que rompe la mayoría entre bloques, por lo que este partido podría provocar un vuelco en la institución cuando lo considerara oportuno en alianza con el PSPV y con Compromís.
No obstante, la crisis abierta en la formación socialista parece haber enfriado esta posibilidad a corto plazo. La idea de dar un golpe de timón en la Diputación frente a un PP liderado por Mazón, muy criticado por su gestión en la Dana y aliado con Vox en cuestiones que Ens Uneix no comparte, tenía cierto atractivo para encarar la segunda mitad de la legislatura.
Sin embargo, las últimas informaciones relacionadas con el PSOE -a falta de conocer qué más episodios del caso saldrán a la luz-, no resultan un incentivo para llegar a un pacto con los socialistas en este momento, según admiten fuentes de Ens Uneix.
Prueba de ello son, directamente, los mensajes en la red social X del propio Jorge Rodríguez estos días. El pasado 12 de junio, el líder de Ens Uneix, a raíz de la comparecencia de Pedro Sánchez en la que pidió perdón por lo ocurrido con Santos Cerdán, señaló: "¿Qué ocurre con quién fue destrozado sin preguntar? Dos años después de ser absueltos continuamos esperando sus disculpas y las de @ximopuig tras destrozarnos la vida".
En esta línea, el pasado sábado también aprovechó las últimas novedades en el caso Azud para señalar a la formación socialista: "Quien ordenó contratar a Vera en Divalterra no fue precisamente Ábalos. Y es que el orégano ("orenga" en valenciano) está en todos los guisos y la UCO lo sabe". Una crítica velada al que fuera alcalde de Gandia y jefe de Gabinete en la Diputación y próximo a Ximo Puig, José Manuel Orengo.
Unos mensajes que apuntan a que la distancia, al menos con una parte del PSPV, no se ha reducido ni mucho menos, lo que unido al desgaste de estas siglas fruto de la citada investigación, apunta a que Ens Uneix se mantendrá deshojando la margarita como mínimo unos meses más.