VALÈNCIA. “No pueden salir por la cantidad de agua, se han quedado atrapados dentro de la casa, si salen se los lleva el río”. Es la transcripción de una de las llamadas recibidas por el servicio de emergencias 112, de la Generalitat Valenciana, relativas al fallecimiento del marido y dos de los tres hijos de una familia de Chiva, que contactó con la centralita hasta en cinco ocasiones entre las 17:10 y las 17:51. La familia ha dado permiso a la jueza que instruye la causa penal en el juzgado de Instrucción 3 de Catarroja para que integre el contenido de las llamadas en la investigación.
Según el último auto de la instructora, estos audios "tienen una doble importancia". Por un lado, "muestran el padecimiento que sufrió" la madre de la familia, "a quien nadie alertó" pese a la ingente información que había sobre la Dana; y por otra parte, "confirman que la Administración Autonómica, competente en materia de protección civil, a través del 112 Comunidad Valenciana, conocía perfectamente que el barranco se había desbordado a su paso por el término de Chiva, con tal intensidad que finalmente tres miembros de una misma familia acabaron pereciendo".
Uno de los hijos fue el que llamó primero al 112 para avisar del peligro que corría su familia: “No pueden salir por la cantidad de agua, se han quedado atrapados dentro de la casa, si salen se los lleva el río”, dijo una y otra vez, antes de informar de que se encontraban en Chiva. Pedía auxilio "porque hay un río detrás, que se ha llenado y corre el agua un montón y no pueden salir de la casa” y alertaba de que les llegaba el agua "por la mitad de la altura de la mesa y no pueden salir”. “No, no, no se los está llevando el río, están dentro de la calle, están que no pueden salir ni nada", aclaraba ante las preguntas del agente. Este preguntó si había algún peligro o riesgo, a lo que el hijo de la familia respondió: "Sí, de que se ahoguen, si salen de la casa se los lleva el río.” Repite: “Está inundado, están inundados”.
En una segunda llamada avisó de que sus padres, de 70 y 74 años y dos hermanos estaban atrapados y tras preguntársele si el agua les llegaba a los afectados por encima de la rodilla, contestó: “Sí, por encima de la mesa del comedor”; “un metro, un metro y medio”. Desde el 112 se le preguntó si la casa tenía dos plantas o solo una. Y en otra llamada el hijo insistió: "Se están ahogando mis padres en el chalet”. Así, explicó al 112 que había contactado con su madre y que le llegaba el agua por el cuello.

- Foto: GVA
La hermana de la madre de la familia, que presenció los hechos, suplicó en otro contacto que mandasen un helicóptero, y dijo: “Hay una familia que se está ahogando”. A ella se sumó otra llamada posterior, donde señalaba igualmente que se había desbordado el río y que había cuatro personas enganchadas a una ventana. "Repite que se van a ahogar cuatro personas y que se ha desbordado por arriba, por abajo", expone el auto de la jueza al transcribir la comunicación, a la que le siguió una última llamada repitiendo que la familia estaba agarrada a la ventana y que se la iba a llevar "el agua de un momento a otro, a los cuatro". “Dos chicos jóvenes, mi hermana y su marido”, señaló.
La primera de las llamadas en la que se oye a Jose Enrique, al hijo de Elena, se produjo a las 17:10 horas, la última a las 17:30 horas. Las tres llamadas de la hermana tienen lugar a las 17:31, a las 17:39 y a las 17:51 horas.
"Inexplicable la ausencia de respuesta"
La jueza instructora citó a declarar como investigados tanto a la que fuera consellera de Emergencias, Salomé Pradas, como al número dos de la conselleria, Emilio Argüeso, ambos miembros del Cecopi. Este segundo había pedido que se aclarase por qué se le imputaba y en el último auto, la titular del juzgado reafirma que las nuevas pruebas que se van conociendo "confirman la procedencia" de la citación e insiste en que el auto de la citación hizo un relato "suficientemente claro" sobre el objeto de la instrucción. Fundamentalmente, el envío tardío del mensaje ES-Alert a la población, remitido a las 20.11h de aquella tarde.
El auto, agrega, es consecuencia de las declaraciones de familiares y testigos, informes y documentación "obrante en la causa en el momento de su dictado". En ellas "se detallan algunos, no la totalidad, de los casos" y la causa "sigue avanzando y se suman, no sólo nuevas declaraciones, sino también nuevas pruebas que confirman la procedencia de lo ya resuelto, la imprescindible citación como investigados de Salomé Pradas -exconsellera de Justicia e Interior- y de Emilio Argüeso".

- La ex consellera de Justicia, Salomé Pradas, y el número 2 de Emergencias, Emilio Argüeso. Foto: KAI FÖRSTERLING/EFE
Respecto de los indicios, añade, aquel auto ya señalaba la ingente información de que se disponía por la Administración Autonómica, la AEMET, el 112, la Confederación Hidrográfica del Júcar o los medios de comunicación, "lo que hacía inexplicable la ausencia de respuesta por parte de la misma, la ausencia de avisos a la población, en cualquier lugar donde pudieran encontrarse, en la calle, en el trabajo, de camino a casa en sus coches, en los domicilios o en residencias de la tercera edad".
El Consell insiste en que "ninguna agencia transmitió nada al Cecopi"
Por su parte, la Generalitat reitera que "ninguna de las agencias responsables de la información que dice la jueza que permitían conocer que el barranco se estaba desbordando transmitieron nada al Cecopi de sus propios datos al respecto durante toda la tarde" y se pregunta si "tenía que ser la administración regional la que interpretara los datos de la Aemet en el lugar de la Aemet y los datos de la CHJ en nombre de la CHJ".
De hecho, las mismas fuentes insisten en que el mensaje de ES-Alert se envió a la población por la presa de Forata y no por el barranco del Poyo. En esta línea, se preguntan si la Aemet sabía que el barranco se estaba desbordando "¿por qué no dijo nada en el Cecopi?"; por qué no dijo nada la Delegación del Gobierno o cortó carreteras o la CHJ cuando la vigilancia de los barrancos "era competencia suya". Y subrayan que todos estos organismos sí que intervinieron para hablar de otros temas.
La Generalitat recalca que el 112 "atendió todas las llamadas y dio aviso a los servicios de atención de emergencia", pero añade que, "según confirman asistentes al Cecopi, como el ex secretario autonómico de Emergencias, Emilio Argüeso, no hubo ninguna comunicación al respecto del contenido de las mismas". Según el Consell, si los datos individuales de cada agencia --Aemet, CHJ, 112 y Delegación del Gobierno-- permitían "conocer perfectamente" que el barranco se estaba desbordando --como señala la magistrada-- "¿cómo es que nadie dijo nada en toda la tarde ante algo tan obvio?".