VALÈNCIA. Vox mueve ficha en la provincia de Valencia. El partido que lidera Santiago Abascal anunció este jueves cambios sustanciales en la cúpula de esta demarcación, de los que pueden extraerse distintas conclusiones interesantes para esta segunda mitad de la legislatura.

Unas modificaciones que se resumen en la sustitución como presidente provincial del veterano diputado (29 años en el Congreso y 4 en el Senado por el PP y ahora 6 más con Vox en la Cámara Baja), Ignacio Gil Lázaro, por Vicente Barrera, quien fue vicepresidente del Consell al inicio de la legislatura fruto del pacto entre populares y voxistas.

Además, desde el partido de Abascal se comunicó la incorporación del exconseller de Agricultura José Luis Aguirre como vicepresidente provincial. Con la salida de Gil Lazaro, según explicaron fuentes de esta formación, se produce de forma automática el del resto de la dirección, por lo que "en breve", aseguraron, se nombrará al resto de miembros de la cúpula. 

Así, si bien esta maniobra trató de anunciarse como un adiós voluntario de Gil Lázaro, distintas fuentes apuntaron a la imposición de esta especie de gestora con Barrera y Aguirre al frente desde la calle Bambú, donde se ubica la sede de Vox en Madrid, con el objetivo de ofrecer "un nuevo impulso" al partido en un provincia tan relevante como la valenciana. Además, de la decisión también se desprende, así lo admitían varios dirigentes, que existía cierta pérdida de confianza en Gil Lázaro, quien en su día ya fue cuestionado por su elección de diversos candidatos en la provincia.

En este sentido, el reintegro a la primera línea política de Barrera y Aguirre invita a situar a ambos dirigentes en todas las quinielas para, no sólo formar parte de las futuras candidaturas, sino incluso también para encabezarlas.

Esta posibilidad no es nueva. En más de una ocasión se ha especulado con la posibilidad de que el empresario y torero retirado pudiera optar a ser el cabeza de cartel de Vox para el Ayuntamiento de València. De hecho, ya formó parte de la lista en 2023 como número siete de la candidatura. De la misma manera, hay quien opina que su experiencia como vicepresidente del Consell podría sumar puntos para ser el primera espada para la Generalitat; mientras que Aguirre, también bien valorado en la capital, podría ser una opción para encabezar la lista en el Cap i Casal.

No obstante, también cabe recordar que, si se habla de candidatura autonómica, Vox tiene en la presidenta de Les Corts, Llanos Massó, a su máxima autoridad institucional en la actualidad, por lo que algunas fuentes la sitúan como una opción plausible como número uno para el Gobierno valenciano.

Ahora bien, otros dirigentes de Vox en el ámbito nacional opinan que en Bambú todavía no hay ninguna hoja de ruta en cuanto a candidatos para la Comunitat Valenciana; especialmente cuando hay otras elecciones autonómicas que tienen un carácter más inminente, como las que se avecinan en Andalucía o Castilla y León, y quizá en Extremadura y Aragón.

En esta línea, señalan que aunque el movimiento en Valencia supone dotar de mayor visibilidad a activos del partido como los antes mencionados, lo que en un momento dado podría implicar que fueran cabezas de lista para alguna de las instituciones en liza, tampoco puede descartarse la incorporación de algún mirlo blanco -personalidad de fuera del partido- llegado el momento para liderar alguna de las candidaturas.