VALÈNCIA. Zulima Pérez (Alcoy, 1980), es asesora del Ministerio de Política Territorial, que hace dos meses la nombró coordinadora del Comité de Expertos del Gobierno de España para la Reconstrucción. En esta entrevista dividida en dos partes aborda, por un lado todo, lo relacionado con la reconstrucción tras la Dana, sobre la que afirma: "Podría existir más coordinación, pero la interlocución entre Gobierno y Generalitat es casi diaria".

En esta segunda parte, responde sobre los desafíos que tienen las comunidades autónomas en su relación con el Estado, como el retraso en la reforma del sistema de financiación autonómica, la quita de la deuda y la reclamación del Consell de ayuda a fondo perdido del Estado a la Generalitat por la Dana. Además, se pronuncia sobre las políticas de solidaridad en relación con los menores extranjeros no acompañados y las medidas adoptadas para garantizar la igualdad de trato en situaciones de contingencia migratoria.

El Gobierno ha tenido que ampliar el plazo para que las comunidades autónomas renuncien voluntariamente al dinero de la Unión Europea no ejecutado para destinarlo a la reconstrucción de Valencia tras la Dana porque solo Canarias había accedido, ¿Sabe su hay alguna comunidad más que se haya solidarizado?

No sé si hay alguna más. Se pedía la solidaridad del resto de comunidades autónomas con una situación que se había producido en Valencia. Realmente, es dinero no ejecutado, que podía coadyuvar a la recuperación. Hay muchas cosas que no tienen explicación, sobre todo el comportamiento de determinadas comunidades autónomas de otros partidos políticos.

¿Tendremos una reforma del sistema de financiación autonómica en esta legislatura?

El sistema de financiación autonómica está caducado y tiene que reformarse. La voluntad del Gobierno de España está y estaba. El único problema para poder reformar el sistema de financiación es que necesitas un acuerdo con otros partidos políticos y en este caso, con el Partido Popular. La reforma del sistema de financiación necesita acuerdo con el PP, y el PP está en contra de todo, no se entiende que no se entre a hablar y a debatir sobre el sistema de financiación autonómica. El PP está por no llegar a ningún acuerdo y a su socio de gobierno mayoritario, Vox, le da igual porque no cree en las comunidades autónomas. El Gobierno está por la labor pero se necesita acuerdo.

¿No cree que le corresponde al Gobierno presentar un proyecto y que se pueda debatir?

Es dificil presentar un proyecto que no va a tener visos de salir adelante. Se tiene que empezar a negociar ya, poniendo algunas cartas sobre la mesa y teniendo más voluntad negociadora, una de las cosas que el PP no tiene. El gobierno de España sí que ha dotado de muchos más recursos a las comunidades autónomas para que puedan gestionar las competencias que tienen. Hemos de recordar también que todo este tiempo tampoco ha sido muy propenso a poder acordar un sistema de financiación nuevo, teniendo en cuenta que hemos sufrido una pandemia, la crisis de Ucrania, que tuvo además aparejada un incremento de precios... El gobierno de España ha puesto más recursos en el modelo de financiación al alcance de las comunidades para que pudieran gestionar esto.

Pero se reparten igual de mal para la Comunitat Valenciana.

El sistema de financiación hay que cambiarlo. Se tiene que poner en valor el hecho de que, si esta parte que necesita acuerdo no se puede reformar o cuesta reformarlo, al menos tenemos que garantizar que las comunidades autónomas sigan funcionando. Recordemos crisis anteriores en las que el gobierno de Rajoy ahogó a las comunidades autónomas, momentos en los que en la Comunitat Valenciana había un problema de impagos absoluto. El Estado lo que ha garantizado a las comunidades es liquidez, que puedan seguir pagando, y eso tiene una importancia grande a pesar de no haber reformado el sistema de financiación. Y además lo que se ha hecho es poner sobre la mesa una quita de la deuda histórica.

Respecto a la quita de la deuda tampoco había acuerdo con el PP, pero el Gobierno sí que ha puesto sobre la mesa su propuesta a pesar de la falta de acuerdo. ¿No podría hacerse lo mismo con la financiación autonómica?

Ha habido una propuesta y no ha sido ni siquiera aceptada. Nosotros hemos tenido una reivindicación histórica, la reforma del sistema de financiación y la condenación de la deuda. Incluso ha existido un clima de casi acuerdo en el ámbito de la Comunitat Valenciana, porque el PP al principio no estaba y Vox ni está ni se le espera. Pero el resto de fuerzas políticas hemos sido siempre conscientes de la necesidad de hacer esas dos cosas. Las cuentas de la Generalitat tienen una parte de activo y otra de pasivo. Dentro del pasivo hay una gran cantidad de deuda financiera, que viene originada en un 80% por la infrafinanciación, originada durante gobiernos manirrotos del Partido Popular.  Se va generando y se va incrementando la deuda porque los mecanismos que se utilizan para pagar esa deuda te generan más deuda. No entiendo, por tanto, que no se acepte una solución que se pone sobre la mesa para poder reducir esa deuda y que la Comunitat Valenciana pueda tener unas balanzas mucho más saneadas.

¿No cree que la Comunitat Valenciana acabará aceptando la quita?

Espero que la Comunitat Valenciana lo acepte, porque es bueno para los ciudadanos y ciudadanas. Lo que tenemos sobre la mesa es que el 19,3% de la deuda valenciana puede pasar al Estado, y por lo tanto es una reivindicación que habíamos tenido desde siempre y que debería aceptarse y debería mostrarse.

Usted y el secretario de Estado de Política Territorial, Arcadi España, estaba en el Consell de Ximo Puig que reclamaba un fondo transitorio de nivelación para reducir la infrafinanciación. ¿Qué ha ocurrido para que el PSOE haya dejado de apoyar esta reivindicación?

No se ha dejado de apoyar. Lo que pasa es que ha pasado a un segundo plano y no se habla tanto del fondo de nivelación.

¿Le parece progresista que la recaudación del impuesto a la banca se reparta entre la comunidades autónomas en función del PIB, de manera que cuanto más ricas son, más reciben?

Lo que me parece poco progresista es solicitar más recursos del gobierno de España y a la vez bajar los impuestos a las personas que más tienen, que es lo que ha hecho el Gobierno del PP en la Comunitat Valenciana. No aceptar la condonación de la deuda y además realizar un esfuerzo fiscal que a todas luces baja impuestos a las grandes fortunas y perjudica a las personas que menos tienen.

¿Se va a resolver con el nuevo real decreto-ley el problema de los menores extranjeros no acompañados de Canarias y Ceuta o van a hacer falta más medidas?

El real decreto-ley es es un plan de país que pone sobre la mesa una reivindicación que tenían las comunidades autónomas de frontera. Tiene que quedar claro que de lo que estamos hablando es de menores no acompañados, que han venido sin sus padres y huyendo para tener una vida mejor. Cuando llega cualquier migrante a una comunidad frontera puede moverse e irse a otros sitios. En el caso de los menores, las comunidades autónomas tienen la tutela de estos menores y por lo tanto existe y ha existido un problema de hacinamiento, como en Canarias. Este decreto ley lo que pone sobre la mesa es la solidaridad de otras comunidades autónomas para poder hacer frente a esta situación. Y es una solución que ahora ayuda a comunidades como Canarias y como Ceuta, que tienen una situación de contingencia migratoria muy elevada y que van a poder repartir a menores que tienen allí, pero que en cualquier otro momento puede servir para otra comunidad autónoma. Nosotros, como Comunitat Valenciana, hemos sido durante mucho tiempo una comunidad receptora de inmigración y puede ser que en un determinado momento recibiésemos un gran número de menores no acompañados.

¿Cree que es un problema del color de la piel, como ha dicho el ministro Torres?

El color de la piel muchas veces tiene mucho que ver con la respuesta que damos. Cuando han llegado menores de Ucrania huyendo de la guerra, España acogió a estos menores migrantes y no hubo ningún problema. Muchas veces, cuando el niño o la persona es más distinta a nosotros existe mucha más oposición.

A veces esta solidaridad es impuesta y cuando hay que ponerla sobre la mesa muchos miran hacia otro lado...

Pues es muy triste. Más que impuesta es regulada, porque atiende a lo que es la situación de contingencia migratoria. Es una cuestión de justicia absoluta. Vamos a intentar mirar por el interés del menor, es lo que tiene que primar en cualquier tipo de actuación.

Se articuló una partida de 100 millones de euros para las comunidades autónomas que van a atender a estos menores. La Generalitat Valenciana dice que es muy poco dinero, pues sale a 50 euros por persona y día. ¿Cabe la posibilidad de aumentar esta partida?

Es una cuestión compartida entre el Estado y las comunidades autónomas. Por lo tanto, se ayudará en lo que sea posible desde el Ministerio.

 

También se queja el Consell de no recibir ayudas a fondo perdido del Gobierno para la reconstrucción de la Dana, porque le ha dado permiso para endeudarse y un anticipo de 500 millones de las transferencias, pero no ayuda a fondo perdido, mientras que a los ayuntamientos sí.

Nosotros lo que hemos hecho es ayudar a los ayuntamientos en el marco de sus competencias. La Comunitat Valenciana tiene los suficientes recursos para hacer frente a sus competencias propias. Es importante también que en el marco de las competencias de cada uno y del autogobierno se pueda regular o hacer frente a determinados supuestos. Evidentemente el Estado ha ido mucho más allá del marco de sus competencias a la hora de ayudar en la reconstrucción. Lo hemos hecho para ayudar a los ayuntamientos, a los cuales ya se han transferido los 1.700 millones, pagando y financiando el 100%. Nunca antes se había financiado el 100% de las infraestructuras municipales afectadas. Si vamos al marco comparado, tampoco en otros países sucede esto.

A la Generalitat le va a suponer de momento 3.000 millones de deuda más. ¿No cree que debería echar el Estado una mano?

Es un discurso pernicioso el que tiene la Generalitat Valenciana con esto. Hay que analizar todas las actuaciones que hace el gobierno de la Generalitat en relación a sus balanzas fiscales, es decir, a sus ingresos y a sus gastos. Lo que no se puede pretender es pedir dinero por todo y bajar impuestos a las grandes fortunas, que tendrían que aportar más a la Comunitat Valenciana. Tenemos a un gobierno de la Generalitat por un lado pidiendo fondos, por otro lado bajando impuestos a las grandes fortunas, y por otro diciendo que no quiere una quita de la deuda. Me parece un discurso carente de coherencia. Hay que tener coherencia.