MADRID. La asociación Desempantallados, que agrupa a miles de familias preocupadas por la digitalización en la educación, ha aplaudido la decisión de la Comunidad de Madrid de restringir el uso de pantallas en los centros de educación infantil y primaria y ha instado a que se promulgue una normativa nacional que garantice "un uso seguro de la tecnología en todos los ciclos formativos".
En un comunicado la asociación afirma que desde 2020, las "miles de familias" representadas en Desempantallados en España trabajan para "frenar la digitalización descontrolada en colegios públicos, privados y concertados, promoviendo un entorno de aprendizaje saludable". Añaden que "la digitalización, como cualquier avance, requiere regulaciones que prevengan riesgos y protejan la salud y el bienestar de los menores".
Desempantallados recuerda dque "las principales asociaciones médicas y agencias de seguridad han alertado sobre los efectos perjudiciales de la digitalización descontrolada en la educación" y considera que "es un clamor el que de forma continua están trasladando sus profesionales pidiendo frenar este grave problema de salud pública". Estas asociaciones han propuesto medidas para garantizar un entorno seguro y sano en el uso de pantallas durante la infancia y la adolescencia y Desempantallados apoya estas iniciativas y celebra que algunas comunidades autónomas, como la Región de Murcia y Comunitat Valenciana, hayan comenzado a implementar regulaciones en 2024. Por ello, considera que con la decisión de Madrid se da "un paso significativo en la dirección adecuada".
"Valoramos que la Comunidad Autónoma de Madrid haya decidido establecer un marco más seguro para los menores al menos hasta los 12 años. Esta medida también representa un gran avance en la protección de la salud infantil y responde a la preocupación de muchas familias que estamos sufriendo los efectos negativos de la digitalización en nuestros hijos", expresan las familias en el comunicado. Y añaden: "También valoramos positivamente que se respete a las comunidades educativas de todos los centros públicos y privados. Consideramos que igual que cuando se creó una normativa de seguridad y salud para la construcción no se atentó a la libertad creativa y profesional de los arquitectos, igualmente ahora observamos que velar por un marco sano y seguro para el uso de la tecnología en las aulas tampoco atenta ni el ideario ni la libertad pedagógica de un centro educativo".
Por otro lado, la asociación Desempantallados apoya la decisión de limitar el uso de dispositivos electrónicos al ámbito escolar, evitando su imposición en el hogar. Asegura que el modelo 1 to 1, que reemplaza los libros de texto por dispositivos digitales, ha generado desigualdad y conflictos en muchas familias. "No todos los hogares pueden garantizar un adecuado acompañamiento del menor en el uso de estos dispositivos, lo que crea una brecha socioeconómica y dificulta la educación equitativa. Esto especialmente está dañando a las familias más vulnerables", explica.
"Instamos a todas las fuerzas políticas a trabajar en una legislación nacional y autonómica que proteja a los menores desde infantil hasta bachillerato, asegurando un uso seguro, saludable y no discriminatorio de los dispositivos electrónicos en el entorno educativo", expresa la asociación, que añade que "este esfuerzo legislativo debe contar con el respaldo de familias y docentes, quienes son testigos desde hace más de un lustro del impacto negativo de la digitalización descontrolada en la salud, el bienestar y la convivencia escolar".