VALÈNCIA. La dirección general de Patrimonio, dependiente de la Conselleria de Hacienda, adjudicó este miércoles en una subasta un total de once inmuebles procedentes de herencias sin testamento en las que la Generalitat había sido declarada heredera. Lo hizo por valor de alrededor de 1,3 millones de euros, según fuentes del Consell. 

De esta operación destaca que el precio de salida acumulado de los inmuebles era de unos 1,2 millones en primera subasta y unos 774.000 euros en cuarta subasta. De manera que la cantidad obtenida en la adjudicación de los lotes ha sido de un 21% por encima del precio de licitación, explican desde la Generalitat.

Es la primera subasta de estas características que realiza, desde 2019, la Conselleria de Hacienda que lidera Ruth Merino a través de la dirección general de Patrimonio –que dirige Tony Woodward–. Es probable que haya más en los próximos meses. 

Los ingresos obtenidos se destinarán a fines de interés social y a mecenazgo cultural, algo que se encuentra regulado en el procedimiento para la tramitación de expedientes de herencias intestadas a favor de la Generalitat. Concretamente, más de 882.000 irán a parar a fines de interés social y más de 440.000 euros a actuaciones del Plan de Mecenazgo Cultural de la Generalitat.

Los inmuebles que se han subastado son los siguientes: un piso ubicado en la calle Salamanca de València, otro en la calle San Vicente Mártir, otro en Obispo Don Jerónimo y otro en la calle Puerto Rico; un local en Avenida Primado Reig; una vivienda urbana residencial en Rocafort, tres plazas de garaje en las calles Xàtiva y una en San Vicente Mártir de València; y una parcela rústica en la partida Magdalena de Castelló de la Plana.

En la subasta participaron un total de 47 licitadores y solamente un lote ha quedado sin adjudicar.