VALENCIA. El Real Automóvil Club de Cataluña (RACC) cierra su delegación en el centro de Valencia, ubicada en la calle Pascual y Genís número 10. Según explican desde la aseguradora, la intención es acercarse más al socio y capilarizar su presencia en la ciudad con dos oficinas. Éstas aún no tienen ubicación y según apuntan desde la empresa, serán elegidas por la abundancia de socios en las zonas.
Aunque hasta el momento se trataba de una delegación de la propia aseguradora, fuentes de los trabajadores apuntan a que se les ha ofrecido un modelo de franquicia para mantener las oficinas y recolocaciones en otras delegaciones. Este régimen de franquicia ya es utilizado por muchas aseguradoras y esto permitiría al RACC agilizar su estructura.
Desde la aseguradora apuntan a que el cierre será inminente, y que la apertura de oficinas debe ser prácticamente consecutiva. Aunque niegan tener un plan definido, desde hace un año el RACC inició una oleada de despidos que no afectó a la delegación valenciana. La caída del consumo y de la compra de vehículos implicó que se propusiera un ERE de 194 de sus más de 1.500 trabajadores, alrededor del 13% de la plantilla.
Con 913.100 socios, 22.000 menos que en 2011, el RACC registró unos ingresos de 336 millones de euros en 2012, el 11% menos, y sufrió unas pérdidas de 4,89 millones, las primeras de toda su historia. Entre las medidas de saneamiento, el RACC ya anunciaba que iba a convertir en franquicias el 18% de sus delegaciones.