VALENCIA. La Generalitat Valenciana cerrará Ràdio Televisió Valenciana (RTVV) porque no tiene los 40 millones de más que cuesta la plantilla tras la anulación del ERE. Sin embargo, el Consell sí tiene fondos para afrontar el coste anual de los más de 1.200 millones de euros de deuda que acumuló el ente público durante los años en que el PP controló la Generalitat y la televisión y la radio públicas.

De hecho, según el proyecto de presupuestos para 2014 que actualmente está en Les Corts a punto de iniciar el debate parlamentario, recoge dos presupuestos diferentes de dos sociedades de igual nombre pero que son distintas: RTVV y RTVV, SA. La primera es la vieja RTVV, donde solo queda la deuda. La segunda, la sociedad en la que se agruparon los activos de Canal 9 y Ràdio 9 y en la que están todos los empleados.

Lo que resulta llamativo y es una demostración del punto de despilfarro al que llegó la gestión de RTVV durante los últimos 18 años es que el presupuesto de la entidad en liquidación, es decir, el pago de los intereses de la deuda y la amortización de capital de 2014, es mayor que el de la sociedad que debe realizar el servicio público de radio y televisión. 

Según consta en el proyecto de presupuestos, RTVV en liquidación tiene un presupuesto para el año que viene de 107,57 millones de euros, mientras que RTVV SA (la nueva Canal 9) solo tiene 74,1 millones, lo que equivale al contrato programa (68 millones) y poco más. Es decir, la Generalitat gastaría en 2014 de haberse cumplido sus planes un 43% más en tapar el agujero de la nefasta gestión desarrollada en la casa que en hacer dos canales de televisión y dos de radio.

De hecho, los 107 millones de euros de deuda que vence y los intereses es incluso más dinero del que supondría añadir a los 74 millones de presupuesto de RTVV los aproximadamente 40 millones de más que implicaría la readmisión de los casi 1.000 despedidos por el expediente de regulación de empleo (ERE).