CUENCA (EP). El grupo Mahou-San Miguel cuenta con todos los trabajadores de la embotelladora de Beteta (Cuenca) en la nueva etapa de Solán de Cabras dentro de este grupo tras su compra a Osborne la pasada semana.

Así lo ha trasladado la nueva dirección a los trabajadores, según explicó el secretario del comité de empresa, Rafael Benita. El director general de Mahou-San Miguel, Alberto Rodríguez Toquero, se reunía ayer con los empleados de la planta de Beteta y, según Benita, ha expresado a la plantilla la voluntad de ampliar las ventas y potenciar el negocio.

Esto ha tranquilizado los ánimos en la embotelladora donde desde 2001, se ha reducido la plantilla en 68 trabajadores. Benita señaló que a pesar de que Mahou no ha expuesto cambios o novedades a corto plazo para la embotelladora conquense, la intención del nuevo propietario es incrementar el negocio.

"Se desprende de sus palabras que apuestan por vender nuestra agua y si vendemos más agua, significa más turnos y más empleo", destacó Rafael Benita.

MUNICIPIOS

En la comarca de la Serranía Alta, el alcalde de Cañizares, Mario Martínez, destacó la importancia de que la planta de Beteta siga activa y mantenga e incluso amplíe, su plantilla. Además, alertó de que Solán de Cabras es el principal foco de empleo de la zona y lamentó que un trabajador menos en la embotelladora puede ser una familia menos en la comarca.

Martínez confió en que el Grupo Mahou se reúna también con los representantes de los municipios de la comarca para informarles de qué planes tienen para la planta.

En Beteta, el alcalde, Mario Antón, tendió la mano al nuevo grupo responsable de Solán de Cabras y confió en que la llegada de Mahou-San Miguel dé un impulso a la embotelladora.

Antón lamentó que pocos vecinos de Beteta están empleados en la actualidad en la planta, aunque reconoció que es un importante generador de empleo en la comarca.

En la actualidad, la plantilla de la embotelladora de Solán de Cabras cuenta con 117 empleados.