VALÈNCIA. Las dos principales compañías del grupo de Depuración de Aguas del Mediterráneo (DAM) están más cerca de tener nuevo dueño. El grupo valenciano, especializado en la gestión de instalaciones depuradoras, se declaró en concurso de acreedores el pasado mes de septiembre y sus dos divisiones centradas en la valorización de residuos y la ejecución de obras y perforaciones han generado no poco interés.
Se trata de las compañias Valorización y Biogás La Vintena y Restitubo Obras y Servicios, cuya venta puede suponer unos ingresos notables para que el grupo pueda hacer frente a sus pasivos. El administrador concursal nombrado por el el Juzgado Mercantil Número 3, que tutela el proceso, sacó a subasta ambas divisiones y ya ha remitido al juzgado sendos informes con las ofertas que considera óptimas para adjudicárselas.
La planta de valorización de lodos y biogás, situada en Carcaixent, era uno de los activos fundamentales del grupo, por lo que había atraído la atención de hasta una decena de compañías interesadas. El grupo Valoriza ha presentado la mejor oferta, por lo que, a falta de lo que diga el juzgado, el administrador concursal la ha propuesto como adjudicataria, tal como publicó El Economista el pasado lunes.
La oferta de Valoriza asciende a 12,5 millones de euros, y ha quedado muy por delante del resto de competidoras, entre las cuales se encuentra la firma castellonense Facsa, del Grupo Gimeno, que había pujado con nueve millones de euros. Al proceso también había concurrido uno de los antiguos socios de DAM, la Sociedad de Agricultores de la Vega (SAV), dedicada a la gestión de residuos y el tratamiento de aguas, con la que se había aliado en multitud de licitaciones públicas. De hecho, su separación en 2021 fue uno de los factores que influyeron en la posterior quiebra.
Asimismo, habían pujado Ciclagua, del grupo Simetría; el fondo Sandton; y otros como Global Omnium, de Aguas de Valencia; las firmas Prezero, Gesreman y Analqua y el family office Iskander. Todas las ofertas incluían la subrogación de los trabajadores y ha sido el factor económico el determinante para la selección de la propuesta final.
Pero además, se había puesto a la venta la división de obras, una de las firmas especializadas en el sector de la perforación en toda España. En este caso, se habían recibido cuatro ofertas diferentes, de las que ha resultado como favorita la de la compañía Elit, filial de la valenciana Pavasal focalizada en la construcción para el sector logístico, industrial y terciario. De esta manera, todo apunta a que la mercantil se quedará con la división por 800.000 euros aproximadamente, siempre que el juzgado acabe dando el visto bueno.
Además de estas dos divisiones, DAM tiene participación en más de una cuarentena de UTE que siguen activas, además de una veintena de consorcios con otras compañías repartidos por Panamá, Colombia e Italia, paises donde tiene sendas sucursales. Acuerdos a los que también se tendrá que ir poniendo fin alcanzando acuerdos con los diferentes socios.
55 millones de deuda
Entre los motivos de la quiebra, el administrador concursal señala en su informe el "incremento de precios de aprovisionamientos y energía" entre 2021 y 2023 como consecuencia del contexto inflacionario, la adjudicación de contratos "con bajos márgenes o incluso pérdidas", el "aumento de los costes de estructura" sin que se hubieran "traducido en un aumento proporcional de los ingresos", el "impago de gastos por parte de socios, UTE y sucursales" y la "disminución del volumen de negocio" en las UTE, especialmente tras la ruptura con SAV.
El informe del administración concursal recoge también la deuda total del grupo, que asciende a más de 55,5 millones de euros, de los cuales la mayoría (42,5 millones) son créditos ordinarios, más de 360.000 corresponden a salarios y liquidaciones y otros dos millones de euros, a deudas con la administración: retenciones tributarias y de la Seguridad Social y otros créditos tributarios.