Opinión

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En el interior de las cosas

Solsticio de verano

Hace unos días accedieron a la sede del PSOE en la calle Ferraz de Madrid para incautar los mensajes del correo corporativo de Santos Cerdán

Publicado: 23/06/2025 ·06:00
Actualizado: 23/06/2025 · 06:00
  • Giancarlo Staubmann
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CASTELLÓ. Siguen moviéndose las maletas, mochilas y cajas de la UCO. Hace unos días accedieron a la sede del PSOE en la calle Ferraz de Madrid, para incautar los mensajes del correo corporativo de Santos Cerdán. El partido está en estado de shock, confiesan muchos dirigentes, y también cabreado, triste, preocupado, y asqueado por las escuchas desveladas sobre mujeres prostituidas que Ábalos y Koldo manejan como mercancía. Ceses fulminantes, contundencia en las respuestas de la dirección del PSOE en Madrid y Comunidad Valenciana, en todas sus ciudades y comarcas. Unanimidad ante la repulsa y la indignación. La situación es grave, y más de uno y de una, y de dos… contienen la respiración para que estas escuchas no lleguen más lejos, aunque la percepción es que no cesarán y auguran un verano sin vacaciones para el partido socialista.  

Las organizaciones políticas, todas, tienen estas cosas de integrar a gente podrida, a corruptos y misóginos, a acosadores y ladrones. Habrá que legislar con contundencia para luchar en la erradicación de unas prácticas que vienen de lejos, a lo largo de los siglos, desde que la actividad política lo es. Y que nadie se rasgue las vestiduras. La UCO también entró de lleno en la sede del PP de la calle Génova mientras gobernaban el país y mientras destruían discos duros y eliminaban pruebas.

  • David Hockney

Les escribo desde Morella, donde florece el calor insoportable y el Corpus, una celebración de las más antiguas, 1358, del mapa mediterráneo, junto al de València. El sábado por la tarde, Aimar, Biel, Quim y Guillem, mis nietos, se vistieron de blanco con sus fajas morellanas rojas enrolladas en sus cuerpos. Con sus pequeñas espadas de madera, también rojas, y sus botellitas llenas de agua y colorante alimentario “safràn”, mezcla en la mojan las espadas y persiguen a pequeños y mayores para dejarles la marca o mancha de color anaranjado. Es la Degolla del Corpus de Morella, els degolladors y les degolladores corren por las principales calles creando una algarabía de la que es difícil escapar. La inocencia infantil les cubre sin saber el significado de la Degolla, de aquel rey Herodes que decretó la muerte de los niños cristianos, de los Santos Inocentes.  

La vida está llena de escenas para la inocencia infantil y adulta. El tiempo transcurre descargando alegrías y penas, situaciones que desgarran y otras que gozamos. No hay caminos sin obstáculos, ni cielos planos y sin nubarrones. El Corpus de Morella es una fiesta que guardo en los cajones amarillos de la memoria, en el corazón. La tarde del sábado los cuatro gigantes de Morella bailaron como no lo hacen el resto del año, acompañados de una numerosa colla de gaiteros y tabalers. El Corpus es fiesta grande, despide la primavera y marca la llegada del verano, luciendo, literalmente, más que el sol plomizo que reina en el interior castellonense. Los balcones morellanos nos miraban ayer, domingo, engalanados con los “rodabalcons” blancos, inmaculados, con su remates de ganchillo artesanal, a la espera de que transcurriera la procesión general del Corpus y sus numerosos personajes del Antiguo Testamento, sus infinitos símbolos.

  • Miguel Franco. La Degolla de Morella

Este fin de semana hemos degustado la primera “collà” de la temporada estival, tras cruzar el solsticio. Mi vecina Carmen ha venido conmigo a Morella para compartir todas estas experiencias sensoriales, para gozar con la belleza de la ciudad de Els Ports, con la estima de la gente querida, con la gastronomía de Mary en la Pizzeria, de Les Torres y del Hotel Rey Don Jaime. Ayer comimos canelones, como marca la tradición. Mi amiga Marilén los borda, a pesar de los calores que aterrorizan. Regresamos a Castelló cargadas embutido, de la buenísima sobrasada que elaboran Sara y Mari Carmen, con quesos de Morella y con flaons que ya guardamos celosamente en la nevera para que el calor no detenga los sabores de este postre celestial. 

Mi vecina Carmen ya está organizando la Nit de Sant Joan en el Grau de Castelló. Este año la hoguera quemará periódicos, titulares negativos, prepotentes, bélicos, los que cuentan el genocidio de Gaza por parte de Israel, los que hablan de la corrupción, los que mienten y los que cuentan medias verdades. Vamos a quemar lo malo, lo dañino y tóxico. Y brindaremos por la paz y la bondad y el  amor entre las personas.

  • Miguel Franco. La Degolla de Morella

Y, en medio de la placidez de los pasados días morellanos, Trump ataca Irán. 

Buena semana. Buena suerte. 

No se olviden de Gaza.

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