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al otro lado de la colina

Otra vez Irán

  • Trump, dirigiéndose al Air Force One. Foto: WHITE HOUSE
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Dice el refrán que tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe, y a este paso parece que le va a ocurrir a Irán (quizás a estas horas ya le habrá pasado), porque está haciendo puntos para ello, y finalmente se desencadene una cierta escalada bélica, aunque parece y puede ser que sea así, le interese a las élites islámicas Teocráticas de aquel país antaño imperio y siempre poderoso, porque recuerden al griego Esquilo “en la guerra la primera víctima es la verdad”, vamos a ver.

Desde hace ya muchos años prácticamente décadas, Irán y Estados Unidos tienen una complicada relación, de tensión máxima como esos matrimonios que terminan mal en un divorcio peor, pues siendo aliados de antaño (en los años 70, de hecho se decía que Irán era el gendarme americano en el Golfo Pérsico) dejó de serlo tras la revolución del Ayatollah Jomeini en 1979 (con  cierta ayuda de Francia) y ese pais persa se transformó en una República islámica rigorista  de tipo Teocrático, que puso como ejemplo del mal y máximo demonio mundial del islamismo, y por tanto su enemigo, a los Estados Unidos. Así desde aquel momento Irán pasó a formar de parte de la lista negra de los norteamericanos y por eso el presidente George W. Bush la incluyó en el llamado eje del mal (axis of evil al principio), y en los 90 en la época del demócrata Bill Clinton se incluyó entre los países Canalla o Gamberro (rogue state), pero de una forma u otra desde aquel asalto a la embajada Norteamericana (ultraje al suelo USA) el Tio Sam no olvida y tiene al régimen totalitario islamista en el punto de mira.

Además de las cuestiones de enfrentamiento ideológico político entre Irán y USA, hay dos elementos a tener en cuenta por su importancia, uno es el económico, dada las grandes reservas de petróleo (y por supuesto de producción) existentes en el Oriente medio y en concreto en el golfo pérsico (y que puso a prueba la Doctrina Carter), y por otra parte está el factor religioso por el enfrentamiento existente dentro del mundo musulmán, entre sus dos ramas, la chií de la que Iran es líder (este es el bloque minoritario dentro del mundo musulmán) frente al grupo mayoritario, el bloque suní, cuyo líder es su archienemigo saudita aliado de los USA, con el que mantiene una relación cuasi bélica, como hemos podido ver en los campos de batalla de Siria o del Yemen.

Irán hemos podido ver como ya ha buscado la alianza de Rusia y China, con la primera este país busca recibir tecnología y armamento, y respecto a la segunda se basa en relaciones económicas con la exportación de crudo. Por su parte Estados Unidos y con motivo del programa nuclear iraní, y a pesar del acuerdo en su paralización, dadas las sospechas de incumplimiento, ha desarrollado un plan de sanciones para intentar doblegar la voluntad política de la teocracia persa, mediante lo que antiguamente se llamaba guerra económica, hoy en día de forma eufemística se habla de presión diplomática, para que ningún país les compre petróleo; frente a estas presiones Irán parece que está desarrollando una estrategia, que recuerda a la de las capas o fases (algunos la llaman de la cebolla) de la Alemania del Tercer Reich de Adolf Hitler, en la que paulatinamente se va aumentando la tensión y presión frente a sus oponentes, para ir consiguiendo los objetivos, ganando la partida en el último momento con el último farol, recuerden, ocupación del Sarre, la anexión de Austria, la ocupación de los Sudetes, hasta llegar a Danzig y el inicio de la Segunda Guerra Mundial.

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