VALÈNCIA. València se consolida como un ecosistema idóneo para emprender, especialmente en sectores ligados a la industria, la sostenibilidad y la digitalización. Sin embargo, su ecosistema emprendedor también se ve lastrado por dos asignaturas pendientes: las barreras idiomáticas y la falta de conexión con hubs internacionales.

Es la conclusión a la que llegaron los participantes en la mesa redonda 'Impulso del ecosistema tecnológico español: de Valencia a la globalización', celebrada en el marco del Valencia Digital Summit (VDS) y en la que participaron Emilio Gallego (Verazial Labs), Guillermo Jenaro (Colimate Space), Patricia Cháfer (Lanzadera) y Chema Blasco (ICEX).

Los ponentes coincidieron en que la Comunitat Valenciana cuenta con una serie de ventajas que la posicionan como una de las regiones más atractivas para emprender en España. Entre ellas, destacaron la fuerte cultura colaborativa existente entre los distintos agentes del ecosistema —desde aceleradoras y universidades hasta fondos de inversión y startups—, que permite conectar talento, compartir conocimiento y atraer nuevas empresas.

Además, subrayaron el atractivo que supone el coste de vida más bajo respecto a otras grandes capitales y la calidad de vida que ofrece la ciudad, factores que están actuando como imán para compañías internacionales interesadas en instalarse en Valencia. "Aquí se generan muchas oportunidades de crecimiento al poder conectar fácilmente con otras startups", destacaron los participantes.

Sin embargo, más allá de las fortalezas, los expertos coincidieron en señalar los retos pendientes que debe afrontar el ecosistema valenciano para consolidar su posición a nivel internacional. Entre ellos, la necesidad de mejorar la formación en idiomas y reforzar las conexiones con hubs tecnológicos globales, especialmente con Estados Unidos, que sigue siendo la gran referencia en innovación y emprendimiento.

También pusieron el foco en la importancia de que las startups no se queden únicamente en su fase inicial de incubación y validación del modelo de negocio, sino que den el salto a su expansión global una vez alcanzada cierta tracción. "Es fundamental que una empresa empiece en Valencia, desarrolle su negocio y crezca aquí, pero también lo es que sepa internacionalizarse y competir fuera", apuntaron.

Los ponentes de la conversación dejarpm claro que Valencia ha sabido construir una identidad propia dentro del mapa emprendedor español gracias a su vocación colaborativa, su especialización sectorial y su apuesta por la sostenibilidad, pero el gran desafío ahora pasa por romper fronteras y consolidarse como un hub con proyección global.