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VALÈNCIA. Lo de coger una furgoneta, acondicionarla y llevar tu negocio rodando donde te plazca ya no es cosa solo del food truck. Cada vez son más los emprendedores que ven en esta fórmula una manera sencilla de montar un negocio para ganarse la vida con lo que les gusta hacer además de generar impacto dado que muchos de ellos comparten la oportunidad de acercar servicios inexistentes a las zonas más aisladas.

Un salón de estética móvil que ofrece servicios profesionales de belleza y bienestar directamente en pueblos rurales con escaso acceso a este tipo de recursos es la idea que tuvo Estefanía Escolano Ávila cuando creó Micro’Van, expresión que hace referencia tanto a su microemprendimiento como a algunas de las técnicas que aplica en sus tratamientos, como el microblading y la micropigmentación.

Apasionada de moverse en camper y explorar zonas rurales, esta valenciana residente en Granada decidió fusionar su gusto por la movilidad con su profesión de estética. Para ello, aha acondicionado una ambulancia retirada ya de la circulación y la ha convertido en una cabina estética móvil con la que, por ahora, recorre algunos de los pueblos de las Alpujarras. “Quería hacer algo diferente e innovador” y acercar la belleza “a la gente que no tiene acceso a ella”, declara esta emprendedora que, además de belleza, dice ofrecer “dignidad, autoestima y oportunidades inclusivas al mundo rural”.

La primera ecoambulancia

Aunque Estefanía Escolano utilice la palabra “disruptivo” para referirse a su modelo de negocio, la verdad es que son más los emprendedores que han optado por ‘romper’ el mercado con una propuesta similar. Técnico especializada en radiodiagnóstico, Marina Escrivá Novillo lleva años trabajando en el hospital de la Cruz Roja de Madrid. Sin embargo, decidió procurarse unos ingresos adicionales ofreciendo un servicio de ecografías a domicilio a mujeres embarazadas y a bajo coste. 

Primero se compró un ecógrafo portátil con el que iba ofreciendo el servicio casa a casa. Como vio que la idea funcionaba, alquiló posteriormente un pequeño local para montar una clínica mínima y, tiempo después, optó por expandir el negocio comprando y tuneando una antigua ambulancia con la que recorrer zonas rurales o los municipios más aislados de la comunidad de Madrid. Nace así la primera ecoambulancia del mundo, término que acuñó ella misma. 

Ahora ya no es un negocio tan modesto como en sus orígenes. Mi Primera Ecografía, el nombre que eligió Marina Escrivá para su negocio, ha cosechado distintos premios, ha ampliado el número de clínicas y ofrece la posibilidad de replicar su modelo de negocio, “de éxito probado” a otros emprendedores con el sistema de franquicia.

Daniel Paniagua, por su parte, es el impulsor del Gafasvan, un emprendimiento rural que se basa en una caravana que ofrece servicio de revisiones optométricas y auditivas así como la venta de gafas y audífonos en pueblos de la zona de la Tierra de campos, en la Meseta Norte que abarca Zamora, Valladolid, León y Palencia. Con esta idea quiere este optometrista, sobre todo, facilitar la vida a las personas mayores que habitan en estos territorios, especialmente a los vecinos de Villalpando, su ámbito más inmediato de actuación.

En torno al mundo camper

Y si algunos han encontrado en la autocaravana una forma sencilla de hacer crecer su negocio y mostrarlo por distintos puntos de la geografía, para otros emprendedores es motivo de inspiración y razón de ser de su idea de negocio. 

Una tendencia en auge es la camperización de furgonetas. A su diseño y distribución se dedican en Nomade Nation, una startup fundada en 2022 por Ignasi Ribó con la intención de crear campers con un enfoque al diseño y usabilidad sobre una base de gestión digital.

Aunque operan también en el mercado corporativo, el grueso de las ventas las dirigen al cliente final a través de distribuidores especializados. Lo que no hacen es personalizar la furgoneta a demanda del consumidor. La estrategia consiste en adquirir vehículos vacíos al grupo Stallantis que luego transforman ellos en autocaravanas.  Con este ofrecimiento, dicen haberse convertido en la marca de campers con mayor crecimiento de España, tanto que su problema actual es “la capacidad productiva, ya que vendemos mucho más de lo que podemos producir”, dicen. La empresa cuenta ya con 20 empleados y espera cerrar el año actual habiendo facturado 6.5 millones de euros.

Algo más flexible es la solución de Vancubic, una startup gallega impulsada por Iván Bastero y Jordán Díaz. Aquí sí posibilitan personalizar las furgonetas mediante la adquisición de módulos adaptables y extraíbles que se instalan en cuestión de una hora. El proceso no requiere homologación legal dado que se considera carga. Distinto es el destino del vehículo es comercial.

Por otro lado, aunque el estacionamiento de autocaravanas en la vía pública está permitida, a la hora de acampar la legislación es más estricta cuando se hace en sitios no habilitados para este fin. Facilitar la búsqueda de aparcamiento a los amantes de la autocaravana es lo que hace la aplicación TripStop. En ésta se puede consultar a tiempo real la disponibilidad de plazas en áreas de autocaravanas de España y Portugal y reservarlas en el momento. La aplicación rastrea más de 1700 áreas de autocaravanas además de erigirse en solución para que los propietarios áreas privadas digitalicen sus negocios. El desarrollo corresponde a una startup de Asturias fundada en julio de 2023 y liderada por Javier García, como CEO. La propuesta de TripStop ha sido reconocida con distintos galardones. 

 

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