VALÈNCIA (VP/EFE). El pleno del Ayuntamiento de València ha aprobado provisionalmente este martes, con los votos a favor del PP, Vox y también de los dos exconcejales de Vox, Cecilia Herrero y Juan Manuel Badenas, el cambio en la composición de las comisiones permanentes. La aprobación está vinculada a la solicitud de un informe al Consell Jurídic Consultiu para que avale la ponderación del voto de los representantes de Vox y de los ediles no adscritos. Una enmienda de adición que se ha presentado en el último momento y que ha sido la justificación de los ediles tránsfugas para votar favorablemente la nueva composición de las comisiones.

Había mucha expectación sobre la posición que tomarían Badenas y Herrero en las votaciones del primer pleno tras darse de baja de Vox. Uno de los puntos que generaba dudas era precisamente si los ex ediles de Vox apoyarían la nueva composición de las comisiones permanentes según la cual su voto no será necesario para que el gobierno municipal saque adelante acuerdos en las citadas comisiones.

Catalá pasa la primera prueba

Finalmente los dos concejales no adscritos han votado en el mismo sentido que PP y Vox en la práctica totalidad de los puntos del pleno. María José Catalá consigue pasar así la primera ‘prueba de fuego’ -prácticamente sin un rasguño- mientras siguen las negociaciones con Badenas y Herrero para definir su encaje dentro del consistorio. Y es que hasta pocos minutos antes de iniciarse el pleno, los dos ediles han estado reunidos en el despacho de Alcaldía con Catalá.   

En el debate sobre la nueva composición de las comisiones, la concejala del PP Julia Climent ha argumentado que el cambio de la proporcionalidad en las comisiones se aprueba basándose en sendos informes del secretario general del pleno y de la asesoría jurídica, y se pide el informe al CJC "por las dudas" que plantean los concejales de la oposición.

Los ediles no adscritos han decidido no tomar la palabra durante el debate aunque en declaraciones a los medios de comunicación previas al pleno, han avanzado su voto favorable a la enmienda que solicita un informe al Consell Jurídic Consultiu al parecerles "lo más garantista para todos" porqué son "personas muy de derecho".

"Trampa antidemocrática" 

Los representantes de la oposición han coincidido en señalar que se trata de "una trampa antidemocrática" y que, con la nueva ponderación, "las comisiones informativas no representan la proporcionalidad del pleno”. La portavoz de Compromís, Papi Robles, ha esgrimido durante el debate que la "realidad es que intentan cambiar el resultado democrático de las urnas" porque "el PP solo es capaz de ganar haciendo trampas como en 2007", y se ha preguntado qué "prebendas" han comprometido con los concejales no adscritos para que votaran a favor del cambio de la composición y ponderación de las comisiones.

La concejal del PSPV, María Pérez, ha considerado que esta enmienda es “una trampa” y ha cuestionado que “si la seguridad jurídica” del acuerdo “está garantizada” como ha asegurado Julia Climent, “¿por qué se pide un nuevo informe al CJC?”. También se ha preguntado "qué pasará si el CJC dice que la proporcionalidad no se mantiene" y si el pleno tiene potestad para pedir ese informe.

Por su parte, Climent ha argumentado que el acuerdo que traen a votación "no es nuevo" porque existen precedentes de un supuesto similar en 2018 cuando gobernaba Ribó y que "se mantiene la misma proporción" que se aprobó entonces. 

Nueva composición de las comisiones

Hasta ahora, las comisiones estaban compuestas por siete miembros repartidos de la siguiente forma: el Grupo Municipal Popular con trece ediles contaba con tres miembros en las comisiones; Compromís tenía dos miembros por sus nueve concejales; el Partido Socialista, con siete ediles, tenía un representante y Vox tenía también un representante por sus cuatro concejales. Esta composición aseguraba cuatro votos al bloque de PP y Vox y tres votos a los dos grupos de la oposición.

La nueva composición aprobada este martes mantiene los mismos representantes en los grupos municipales de PP, PSPV y Compromís y el Grupo Municipal Vox mantiene un representante (al haberse quedado con dos ediles) pero se pondera su voto de forma que pasa a valer 0,5. Siguiendo la misma fórmula, el voto de Juanma Badenas valdrá 0,25 al igual que el de Cecilia Herrero. De esta forma, el bloque de izquierdas mantiene tres votos en las comisiones con sus dieciséis concejales mientras que PP y Vox suman tres votos y medio con quince ediles.

Moción del PSPV

Antes de la votación, el PSPV ha planteado presentar una moción in voce y aunque la alcaldesa, María José Catalá, ha asegurado que no se admitía al no haberla presentado en su turno de intervención, finalmente ha aceptado que lo hicieran ante las protestas de los grupos de oposición. En la moción, Pérez ha pedido por "garantía y prudencia a la representatividad de todos" que se aprobara que cada voto se ponderase a razón de 1/33 en las comisiones permanentes mientras el CJC resuelve la legalidad de la nueva composición. Sin embargo, ha sido rechazada por los votos del gobierno (PP y Vox) y también con la oposición de los concejales no adscritos.

Este martes, el pleno municipal también ha dado cuenta oficialmente de su nueva composición tras la salida de Vox de su exportavoz Juanma Badenas y la concejala Cecilia Herrero, que pasan a ser no adscritos: Vox se queda con dos ediles, que siguen en el equipo de gobierno con los 13 concejales del PP. En la oposición Compromís tiene 9 ediles y el PSPV-PSOE, 7.