VALÈNCIA (EP). El portavoz del PP en el Ayuntamiento de València, Juan Carlos Caballero, ha considerado este viernes, respecto a la posibilidad de alcanzar un consenso para la aprobación de la ordenanza reguladora de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de la ciudad y su entra en vigor para cumplir los plazos establecidos por Bruselas y no perder la ayudas vinculadas a ella, que "a estas horas hay pocas probabilidades ya de encontrar un acuerdo".

"No hemos visto por parte de los grupos de la izquierda --Compromís y PSPV-PSOE, en la oposición dentro de esta corporación municipal-- ningún tipo de posición de acercamiento", ha señalado el edil durante la rueda de prensa que ha ofrecido tras la Junta de Gobierno Local preguntado por si puede hacerse efectiva la ZBE y por las reunión "urgente" que la Federació d'Associacions Veïnals de València (FAAVV) ha pedido con su alcaldesa, María José Catalá (PP), para que se llegue a un acuerdo respecto a esa cuestión.

Con el mismo fin, la entidad vecinal ha solicitado también reunirse con los dos partidos de la oposición en el consistorio. La FAAVV ha pedido esos encuentro después de que en el Ayuntamiento no se haya alcanzado consenso para aprobar la normativa de la ZBE y hacerla efectiva.

Las negociaciones entre el PP, Compromís y PSPV-PSOE --iniciadas después de que el socio de los populares en el ejecutivo municipal, Vox, rechazara respaldar la Zona de Bajas Emisiones-- no han dado frutos y no ha sido posible aprobar la ordenanza correspondiente, por lo que la capital valenciana sigue sin delimitar una ZBE.

Juan Carlos Caballero ha asegurado que por parte del PP, de la alcaldesa y del concejal de Movilidad, Jesús Carbonell (PP), se ha dado "buena muestra de un compromiso con la ciudad" y "de querer aprobar una ordenanza para la Zona de Bajas Emisiones" en "tiempo y forma". "Hemos hecho toda la tramitación en las comisiones y en los plenos", ha añadido, a la vez que ha aludido a "los distintos acercamientos" con la oposición en favor de un acuerdo "tras el anuncio de Vox de votar en contra de la aprobación definitiva".

"Nos hemos abierto siempre al diálogo con Compromís y el Partido Socialista. Hemos tendido la mano y hemos intentado acercar posturas. Les hemos llamado para sentarnos. Algunas veces nos han cerrado la puerta o nos hemos enterado de su posición a través de los medios de comunicación, sin haberse sentado con nosotros", ha apostillado Caballero.

Así, ha afirmado que "el PP, la alcaldesa y el concejal de Movilidad hasta en tres ocasiones han intentado acercar posturas". "Nosotros veníamos con un proyecto de ordenanza de ZBE y hemos planteado hasta tres posturas para intentar acercarnos a las exigencias que en primer lugar podría, por ejemplo, tener el Partido Socialista", ha seguido.

El portavoz del grupo municipal 'popular' ha censurado que "PSOE y Compromís han decidido vincular la ordenanza de la ZBE a otras cuestiones que no tienen absolutamente nada que ver con su aprobación, demostrando lo que es bloquear justamente la aprobación" y ha insistido en que "si alguien ha cedido o ha intentado ceder para llegar a un acuerdo ese es el PP y el concejal de Movilidad, que ha hecho hasta tres aproximaciones al grupo socialista y al grupo Compromís".

"El grupo socialista y Compromís todavía no han bajado su listón o no han intentado acercar posturas. No han intentado decir: vale, renuncio al cien por cien de mis posiciones para intentar llegar a un acuerdo", ha añadido Caballero, que ha aseverado que eso es algo que "sí ha hecho el PP".

"Principio de buena fe negociadora"

"Creo que la demostración del principio de buena fe negociadora desde el PP se ha hecho. Ha sido la izquierda la que no se ha movido ni un solo milímetro de sus posicionamientos iniciales. Creo que a estas horas hay pocas probabilidades ya de encontrar un acuerdo. No hemos visto por parte de los grupos de la izquierda ningún tipo de posición de acercamiento", ha expuesto.

Por parte de Compromís, su portavoz en el consistorio, Papi Robles, ha hablado del ofrecimiento de la FAAVV para sacar adelante la ZBE y ha asegurado, en declaraciones remitidas a los medios de comunicación, que este grupo "se congratula del debate vecinal sobre temas clave de la ciudad como la calidad del aire y la movilidad sostenible".

"Valoramos los esfuerzos de la Federación de Asociaciones Vecinales para aprobar una ZBE beneficiosa para la ciudad y su intento de evitar la pérdida de los más de 150 millones de euros --de ayudas vinculados a ella-- a la que nos ha abocado Catalá", ha apostillado Robles.

"OBJETIVO IRRENUNCIABLE" La edil ha manifestado que "la ZBE no puede ser un brindis al sol" y ha destacado que los miembros de Compromís están "abiertos al diálogo con los vecinos y con el resto de actores, pero sin perder de vista que el objetivo irrenunciable debe ser la mejora de la calidad del aire y la protección de la salud de los valencianos".

"Defendemos un modelo integral de movilidad que vaya más allá de la ZBE y apueste claramente por la reducción de emisiones, que sea equitativo y no perjudique a los residentes, al tiempo que dé un impulso ambicioso al transporte público de València", ha subrayado Papi Robles.

Desde el PSPV-PSOE, la concejala María Pérez ha apuntado que este grupo comparte "plenamente" con la FAAVV que "mejorar la calidad del aire es una obligación inexcusable para cualquier gobierno responsable". A su vez ha indicado que los socialistas han sido "coherentes defendiendo que València necesita una ZBE real que tenga la capacidad de reducir la contaminación y no una de mínimos como la que diseñó el PP, que no sirve para proteger la salud pública".

"Escuche al menos a los vecinos"

"Lo hemos dicho en muchísimas ocasiones, la ZBE no es un simple trámite para obtener fondos europeos como plantea el PP, ya que su razón de ser es mejorar la calidad del aire que respiramos cada día y esa debería ser la prioridad de cualquier alcaldesa", ha remarcado. Pérez ha considerado que "es difícil avanzar cuando Catalá admite abiertamente que no cree en la ZBE y que, si de ella dependiera, no aplicaría ninguna restricción".

La representante del PSPV-PSOE ha confiado en que la alcaldesa "escuche al menos a los vecinos de València y reconsidere su negativa a aprobar una ZBE real que impida que los valencianos tengan que pagar por su negacionismo". "Esperamos que la Federación de Vecinos le haga entrar en razón y que asuma que en esta ciudad hay un problema de contaminación y que ella es la responsable de ofrecer instrumentos que la mejoren", ha aseverado Pérez.