VALÈNCIA. La alcaldesa de València, María José Catalá, ha aprovechado la reintegración de los ediles tránsfugas de Vox, Juanma Badenas y Cecilia Herrero, para llevar a cabo una profunda reestructuración en el gobierno local. Una modificación interna que supondrán un cambios de competencias entre ediles populares y los readmitidos concejales voxistas.
Uno de los principales cambios se producirá en las tenencias de Alcaldía. Así, mientras que la edil popular María José Ferrer San Segundo mantiene la primera tenencia de Alcaldía, el segundo teniente será el portavoz de Vox Pepe Gosalbez. Así pues, el exportavoz de Vox Juanma Badenas pierde la importancia que en su momento llegó a tener en el ejecutivo local. Por detrás se mantiene el orden que estaba vigente en este campo: Julia Climent será la tercera teniente y Juan Giner el cuarto.
En cuanto a las concejalías, el grupo de Vox mantendrá las mismas competencias como hasta ahora: por un lado, Empleo y Emprendimiento, Devesa-Albufera, Agricultura, Sanidad y Consumo, que lleva Pepe Gosalbez; Parques y Jardines, Playas, Juventud, Fiestas y Tradiciones que recaerá en Mónica Gil. Por su parte, el readmitido Juanma Badenas se encargará de la delegación de Patrimonio, que hasta ahora dependía del popular José Marí Olano; y Cecilia Herrero, de la de Responsabilidad Patrimonial.
Otro de los cambios supone un trasvase de competencias por parte del voxista Gosalbez al ala popular: la delegación de Mayores, que llevará Marta Torrado, y la Universidad Popular, que depende de Educación, concejalía de Rocío Gil. Además, en el seno del Partido Popular, la Mesa de Contratación pasa de Julia Climent a José Marí Olano.