VALÈNCIA. Comienzan a conocerse los detalles del Plan Estratégico de Empleo, Formación y Emprendimiento 2025-2028 del Ayuntamiento de València tras más de un año con el documento 'en revisión'. A punto de finalizar el 2025 -primer año en el que debía ya aplicarse la estrategia de fomento del empleo que incluye dicho plan- la Concejalía de Empleo del Ayuntamiento de València ha presentado a los agentes sociales el polémico plan de empleo cuya elaboración Vox encargó por 14.900 euros al economista ultraliberal Daniel Lacalle en verano de 2024. Un encargo que la oposición ha denunciado ante la Fiscalía.
Pese a que Lacalle sostiene que entregó dicho plan "en tiempo y forma" el 20 de octubre de 2024, lo cierto es que la Concejalía de Empleo de Vox -antes liderada por Juanma Badenas y ahora capitaneada por José Gosálbez- no había presentado el documento alegando que varios factores, entre ellos la liquidación de la fundación València Activa, hacían necesario que los servicios municipales revisaran y actualizaran el plan.
Un año de revisión para un plan casi idéntico
Sin embargo, el texto definitivo que se ha presentado a los agentes sociales coincide, según una conocida herramienta de IA, en más de un 90% con el que Lacalle entregó en octubre de 2024. El documento mantiene su estructura original, calca su diagnóstico del contexto y gran parte de sus medidas y ejes estratégicos, con modificaciones puntuales. De hecho, el documento emplea datos del contexto socioeconómico y del mercado laboral de 2024 e incluso de 2023, unos datos "totalmente obsoletos" y que no reflejan la situación actual según apuntan los sindicatos y patronal que integran el Pacto por el Empleo de la ciudad de València.
Entre los pocos cambios, el texto definitivo incorpora como novedad la liquidación de la fundación València Activa —que en el borrador de Lacalle seguía figurando como organismo ejecutor— y la sustitución del término "Dana" por la palabra "riada".
Datos desactualizados
De hecho, UGT y Comisiones Obreras, denuncian que el Ayuntamiento ha roto la práctica habitual de diseñar las estrategias de empleo contando con el diálogo social. Los sindicatos señalan que el plan utiliza "análisis subjetivos y sesgados" y reprochan que se basa en datos del mercado laboral de 2023 y principios de 2024, que consideran “no reales ni actuales”, lo que provoca que los objetivos y líneas estratégicas “no se ajusten a la situación actual de València”. Reprochan que incluso en algunos apartados se cita una cifra de SMI desactualizada.
Asimismo, UGT y CCOO sostienen que el plan carece de perspectiva de género, dado que no incorpora un análisis de las brechas laborales entre mujeres y hombres ni desagrega los datos por sexo o edad. A su juicio, esta ausencia “invisibiliza a la población con mayores dificultades de inserción laboral”. También consideran insuficiente la atención a los colectivos vulnerables, pues aunque el plan los menciona —como personas en riesgo de pobreza, parados de larga duración o con baja cualificación—, no los sitúa como eje vertebrador ni desarrolla medidas específicas adaptadas a sus necesidades.
A ello se suma que el documento no incluye una evaluación de la estrategia anterior, lo que impide saber qué aprendizajes deberían haberse trasladado al nuevo ciclo de planificación.
Sin calendarización ni presupuesto
Las centrales sindicales alertan además de que el plan carece de una hoja de ruta operativa, puesto que no incorpora una calendarización de las actuaciones, ni un presupuesto detallado para garantizar su ejecución. Esta falta de concreción convierte la estrategia, según afirman, en un marco declarativo sin mecanismos que aseguren su impacto real. Por todo ello, solicitan al Ayuntamiento que reabra el proceso y vuelva a redactar desde cero el plan con participación efectiva de los agentes sociales y económicos.
La patronal reclama poder participar para enriquecer el documento
La Confederación Empresarial Valenciana también reprocha no haber sido consultada durante el diseño del plan. La patronal recuerda al Ayuntamiento que “es importante poder participar desde el principio” porque el conocimiento directo del tejido productivo permite aportar “ideas prácticas que mejoran la eficacia de las políticas”. La organización empresarial asegura disponer de estudios que habrían contribuido a enriquecer el documento —como su Estudio de tendencias del mercado laboral, talento y necesidades formativas para 2025 o el informe Rehacer y Transformar. Tras la DANA— y reclama incorporar una visión metropolitana que permita mejorar la coordinación entre municipios y planificar desde una lógica supralocal.
Ejes de actuación
El plan estratégico se articula en seis ejes de actuación: fomento del emprendimiento, orientación laboral, formación, intermediación con empresas, oportunidades de empleo —con especial foco en jóvenes y parados de larga duración— y un eje específico destinado a la reconstrucción del tejido productivo tras la Dana. En ellos se recogen objetivos generales como impulsar el autoempleo, reforzar los itinerarios de inserción, mejorar la cualificación profesional, aumentar la captación de ofertas laborales, dinamizar las pedanías afectadas o fortalecer la relación entre empresas y servicios de empleo.
No obstante, pese a enumerar estos ejes y objetivos, el plan no establece un calendario para implementar las acciones concretas ni un presupuesto propio, lo que dificulta su viabilidad real. Tampoco fija la periodicidad con la que la comisión de seguimiento debe evaluar el grado de cumplimiento del plan.
El PSPV tilda el documento de "pseudo plan estratégico"
Tras conocerse el documento, el concejal del grupo municipal socialista Javier Mateo ha señalado que la situación refleja “un nulo interés de Catalá en las políticas de empleo, desde el mismo momento que deja esa competencia en manos de Vox”. Mateo califica el texto de “pseudo plan estratégico” y considera que demuestra “que el encargo a Lacalle era un favor pendiente de pago, con una calidad pésima, sin diálogo social, datos desactualizados, borrado sistemático de la igualdad en el empleo, un análisis sesgado y que además llega tarde”.
Los socialistas reprochan también “que se pretende aprobar casi en el 2026 tras un año ocultando el recorte en políticas de empleo para mujeres, víctimas de violencia de género y colectivos vulnerables”. Mateo apostilla que “Catalá permite esto por mantenerse en el sillón a costa de los valencianos y, sobretodo, de las valencianas”.