VALÈNCIA. Arranca este viernes la última fase de los presupuestos participativos de València. Según ha informado el consistorio, a partir de las 8:30 de la mañana de este viernes 10 de octubre y hasta el 7 de noviembre se podrán votar a través de la web https://vlcparticipa.valencia.es/. las más de 450 propuestas ciudadanas que han superado las dos primeras fases. En total, la partida bianual asciende a 16 millones de euros repartidos por criterios poblacionales y de renta entre los distintos distritos de la ciudad.
Como novedad, los vecinos podrán votar negativamente una de las propuestas, un voto negativo que restará medio punto a la propuesta que lo reciba. La concejala de Recursos Humanos y Técnicos, Participación y Acción Vecinal y Pedanías, Julia Climent ha aclarado que podrán votar todos los mayores de 16 años que estén empadronados en la ciudad pero sólo podrán votarse propuestas de un único distrito, que no tendrá por qué ser en el que estén empadronados. Un mismo ciudadano podrá votar positivamente tantas propuestas como considere hasta agotar el presupuesto del distrito.
Además del voto a través de la web, que se espera que sea mayoritario, el Ayuntamiento habilitará espacios municipales para facilitar la votación presencial, a finales de octubre y principios de noviembre. "Porque es una opción que entendemos más ventajosa para aquellas personas que no se manejen con la tecnología”, ha justificado Climent.
Garantía territorial
También se ha introducido un nuevo criterio llamado 'garantía territorial' para que en barrios con menos peso poblacional puedan salir adelante sus propuestas. Climent ha recordado que barrios como El Calvari o La Llum nunca han conseguido aprobar proyectos por lo que en esta edición se asegura que una parte del presupuesto asignado al distrito se destine a los barrios que tienen menos de 1/3 de la población del barrio mas poblado de su distrito. En total son 18 barrios y pedanías los que tienen esta consideración. Se trata del Pla del Remei, Botànic, La Roqueta, Tendetes, el Calvari, Ciutat Universitaria, Soternes, la Llum, Favara, Camí Real, la Fonteta de Sant Lluís, la Carrasca, Camí de Vera y Ciutat Fallera, entre altres, además de todas las pedanías de la ciudad de Valencia.
En cuanto a las propuestas que han pasado a la última fase, la mayoría de ellas tienen que ver con el área de parques y jardines (181), las propuestas relacionadas con la movilidad son 115 y con futuras obras e infraestructuras (72). La ciudadanía también puede elegir 52 inversiones que ampliarían la oferta de las instalaciones deportivas, y unas 56 relacionadas con otros servicios como el alumbrado público.
Primera y segunda fase
La concejala de Participación y Acción Vecinal ha resaltado la cifras de "récord" de participación de las dos primeras fases del proceso. En total, más de 15.400 personas (5.000 personas más que en la última edición) han apoyado alguna de las 2.776 propuestas presentadas por la ciudadanía a los presupuestos participativos 2025-2026 (1.270 por cien más que en la última edición). Y, con un total 54.000 apoyos, 1.441 de estas iniciativas han conseguido los avales necesarios para pasar a la tercera fase, en la que los técnicos han valorado su viabilidad.
La oposición critica la "falta de transparencia" y los "retrasos"
Desde la oposición, la edil de Compromís, Lluïsa Notario ha acusado al gobierno municipal “no creer en este instrumento de participación ciudadana”. La formación denuncia que el ejecutivo de PP y Vox “recorta recursos, cambia las reglas a mitad del proceso y veta propuestas que recuperan espacio para peatones o fomentan la movilidad sostenible”, y exige la publicación inmediata del listado de iniciativas descartadas y la retirada del acuerdo que, a su juicio, “censura previamente las propuestas vecinales”. “Es un escándalo del que deberían dar explicaciones, pero no han dado ninguna. Le están tomando el pelo a la ciudadanía”, sentencia. Notario también ha afeado los “retrasos” en este proceso.
Por su parte, desde el PSPV-PSOE, la concejala Elisa Valía ha criticado “el retraso, la falta de transparencia y el uso partidista” del proceso, y ha advertido de que las modificaciones introducidas por el gobierno, como el voto presencial y el voto en contra, “no garantizan la transparencia ni el rigor”. Además, ha lamentado que el nuevo sistema “convierte un proceso constructivo en una herramienta para enfrentar a vecinos y vecinas” y ha denunciado que PP y Vox “boicotean la participación real y dan la espalda a la ciudadanía”.