Panorámica del solar de la calle Balmes vallado por el Ayuntamiento de València. Foto: KIKE TABERNER VALÈNCIA. (EP) El colectivo Veïnat en perill de extinció celebra este sábado, 16 de febrero, una chocolatada contra la especulación y turistificación de la Ciutat Vella de València, con el objetivo de que la ciudadanía "tome conciencia" de la transformación de los barrios.
A partir de las doce del mediodía, la plaza el Músic López Chávarri acogerá "juegos especulativos" y una serie de actividades "infantiles y no tan ingenuas", con un chocolate con pasteles y dulces al que la organización invita a todo el vecindario.
Será una jornada "festiva y participativa, a la vez que reivindicativa". "Tomaremos conciencia de las transformaciones que están ocurriendo en Ciutat Vella por la especulación y la turistificación de los barrios", destaca el colectivo en un comunicado.
El objetivo es visibilizar que el Plan Especial de Protecció (PEP) de Ciutat Vella elaborado por el Ayuntamiento "atenta contra los residentes de los barrios" del casco antiguo de València.
Veïnat en perill de extinció quiere "hacer visible la intención de la Concejalía de Urbanismo [dirigida por el socialista Vicent Sarrià] de aprobar un plan que pone en peligro a los residentes y acaba expulsándolos de sus casas". A su juicio, el texto es "insuficiente para detener las agresiones que sufren los barrios, principalmente en forma de especulación y turistificación".
"Cada vez más agudizadas, están alterando de manera acelerada el carácter residencial de nuestros barrios", lamenta, y advierte que "lejos de ser el corazón de la ciudad, se está convirtiendo en un parque temático que expulsa a sus habitantes".
Ante esta situación, la plataforma exige que el Ayuntamiento de València active políticas para transformar solares en viviendas y "aplique la suspensión efectiva de las 70 licencias turísticas que hay en trámite".
También que "no permita que 50 edificios singulares de Ciutat Vella se conviertan en hoteles junto con los bloques residenciales anexos". En definitiva, "que los barrios residenciales lo sean en su totalidad y no parcialmente", junto a que se especifiquen medidas de control efectivo para las viviendas de uso turístico.
"Están en juego nuestras vidas y nuestra ciudad, y nos tenemos que organizar antes de que sea demasiado tarde", reivindica la organización. Está formada por vecinos de Ciutat Vella a título particular y por parte de entidades, colectivos y asociaciones de vecinos, con el apoyo de la red EntreBarris.
