MADRID (EP). El Banco de España ha constatado que los bancos españoles que vieron restringidos sus dividendos por la recomendación del Banco Central Europeo (BCE) utilizaron su mayor capital para aumentar el crédito a las empresas en los primeros meses de la pandemia. En un artículo analítico, el supervisor analiza el impacto de la restricción de dividendos sobre la restricción de crédito utilizando una muestra de entidades bancarias españolas y el hecho de que solo algunas de ellas pudieron repartir dividendos durante los primeros meses de la pandemia, por haber sido ya aprobados en firme antes de la recomendación.
En el periodo analizado (seis meses desde la entrada en vigor del veto al dividendo), el Banco de España ha observado que aquellas entidades que limitaron el pago de dividendos concedieron entre un 12% y un 23% más de crédito a las sociedades no financieras tras la entrada en vigor de dicha recomendación que las que no lo hicieron. "De acuerdo con los resultados obtenidos, la restricción de dividendos parece haber tenido efectos significativamente positivos y económicamente relevantes en la concesión de crédito. Esto sería coherente con la hipótesis de que los bancos utilizan su mayor capital para incrementar el crédito", concluye el Banco de España.
En cualquier caso, el efecto de la restricción de dividendos "parece diluirse" a partir de julio de 2020, lo que podría explicarse por el hecho de que la prórroga en el reparto de dividendos a partir del segundo trimestre afectaría a todas las entidades por igual. Además, los resultados del estudio sugieren que el crédito concedido por las entidades restringidas en el pago de dividendos fue mayor para las empresas para las que se dispone de información económico-financiera procedente de la Central de Balances del Banco de España. Generalmente, estas empresas están asociadas a un mayor tamaño.
Por otro lado, el informe pone de manifiesto que las empresas que recibieron préstamos con garantías públicas, como los créditos con aval ICO, obtuvieron más crédito de los bancos que no repartieron dividendos que de los que sí lo hicieron, lo que en opinión del Banco de España "sugiere una posible complementariedad entre ambas medidas".
Las siete entidades consideradas que repartieron la totalidad del dividendo propuesto con cargo a los resultados de 2019 son BBVA, Banco Sabadell, Bankia, Bankinter, Abanca, Ibercaja y Cajamar, mientras que las cinco que suspendieron parte o la totalidad del dividendo son Banco Santander, Caixabank, Kutxabank, Liberbank y Unicaja.