Ha sido el último valenciano con rango dentro de la estructura de BME, a quien se le ha puesto al frente de la bolsa valenciana para que ésta recupere el brillo de antaño.
VALENCIA. Vicente Olmos Ibáñez (Valencia, 1951) recibió la llamada de Bolsas y Mercados Españoles (BME) en 2007 para hacerse cargo de la auditoría interna del holding que agrupa a los mercados financieros nacionales. Fue todo un reconocimiento —de hecho era el único valenciano con rango dentro de la estructura de BME—, dado que ya había dejado su impronta en la rectora local donde se ocupó, entre otras responsabilidades, del control, gestión y administración como director financiero desde 1991 hasta ese año.
Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universitat de Valèn- cia y funcionario desde 1979 del Cuerpo Especial de Gestión de la Hacienda Pública, sustituyó al frente del parqué valenciano al histórico Ángel Torre. Desde el primer momento tuvo claro que había que tratar de conseguir que las empresas valencianas salieran a financiarse a través de los mercados.
Y en esa labor está, pese a que se puedan contar con los dedos de una mano las cotizadas de la Comunitat Valenciana presentes en alguno de los mercados BME. «Hay una mezcla de razones culturales e históricas las que están detrás de este reducido número de cotizadas valencianas, porque normalmente han recurrido a las entidades financieras que, hasta la crisis, proveían de financiación suficiente y barata a nuestras empresas», apunta Olmos.
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