El director general de la Entidad Valenciana de Suelo y Vivienda (EVha), Rafael Montero. Foto: KIKE TABERNERVALÈNCIA. Los tiempos de la Administración no son siempre todo lo ágiles que uno desearía. Y más cuando se lanza una iniciativa novedosa en la que existen muchos elementos nuevos que hay que articular. Y eso es lo que le ha pasado a la Conselleria de Vivienda con el concurso para la cesión de suelo público a promotores para la construcción de 1.100 viviendas en régimen de alquiler asequible. Una convocatoria que en un principio se barajó lanzar en junio, pero que se ha ido retrasando hasta encontrar la fórmula para vehicular los fondos europeos que recibirán los agentes privados en forma de subvención para acometer los proyectos.
Y es que, como ya avanzara este diario, este plan va a movilizar cerca de 54 de los 500 millones que repartirá el Gobierno este año para la promoción pública procedentes del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR). Una cuantía que se destinará a subvencionar parte de la promoción de inmuebles. Así, se ofrecerá ayudas a los agentes privados de 700 euros por metro cuadrado, con un máximo de hasta 50.000 euros por vivienda para acometer esta colaboración público-privada.
Unas subvenciones que se tramitarán en una orden que todavía se está ultimando y que saldrá en paralelo a la licitación del concurso, con las 17 parcelas públicas que el departamento que dirige Héctor Illueca ha incluido en el concurso. Por tanto, la demora se debe a que "se ha estado trabajando en la figura jurídica que vehiculará estos 54 millones de euros y todos los filtros que deben pasar: desde Intervención hasta Abogacía", explican desde este departamento.
Eso sí, remarcan que el pliego del concurso está listo y aprobado desde junio por la Entidad Valenciana de Suelo y Vivienda (EVha), dependiente de la Conselleria, pero con personalidad jurídica propia. Sin embargo, sin la aprobación de línea de subvenciones no se puede abrir la convocatoria, señalan desde la Conselleria. Dado que los suelos son propiedad de la entidad, que es quien los cede a los agentes privados, la EVha ha sido la encargada de redactar las condiciones de la convocatoria, mientras que es la Conselleria la que debe resolver las ayudas porque es a este departamento al que el Ministerio transfiere los fondos.
De hecho, el propio director general de la EVha, Rafael Montero, afirmaba en julio en una entrevista con este diario, que el pliego de licitación estaba ya aprobado por el Comité de Dirección de la entidad, pero reconocía que el concurso no se había lanzado porque se estaba buscando el encaje para la orden de ayudas, que en aquel momento estimaba que se aprobarían en el mes de julio. Además, Montero consideraba que "no tenía sentido" lanzar el concurso en agosto por el periodo estival.
Por tanto, aunque son dos instrumentos diferentes y que se articulan de forma distinta van de la mano. Y la demora de uno ha retrasado unos meses más de lo previsto todo el proceso. En cualquier caso, Vivienda señala que se está en el trámite final y lo más probable es que la licitación de la convocatoria se abra en octubre. "Septiembre es muy justo", admiten. A las ayudas solo podrán acceder aquellos que finalmente resulten adjudicatarios de alguno de los tres lotes.
Esta iniciativa consiste en la cesión al sector privado del derecho de superficie de 17 parcelas públicas durante un periodo de 50 años, pero sin perder su titularidad. Las empresas construirán el edificio y lo explotarán durante ese periodo en régimen de alquiler asequible. Una vez finalizado el plazo, el inmueble será gestionado por la Administración valenciana y pasará a formar parte del parque público.
Las ayudas irán destinadas a la promoción de los inmuebles que deberán ser energéticamente eficientes y en régimen de alquiler asequible. Sin esta inyección, el concurso no hubiera sido posible. De hecho, ya quedó desierto en su primera edición, que no incluía fondos europeos, porque los requisitos exigidos dificultaban la rentabilidad de los proyectos.
Una de las principales novedades de esta edición es que los 17 suelos, todos ellos propiedad de la EVha, se dividirán en tres lotes de entre 5 y 6 terrenos por una valor total de más de 150 millones de euros. Se encuentran ubicados en diferentes municipios repartidos entre las provincias de Valencia y Alicante. En concreto, de esas 1.100 viviendas proyectadas, 34 unidades estarán en Alicante; 58 en El Campello; 512 en Sant Joan; 36 en San Vicentes del Raspeig; 122 en Gandia; 41 en Silla; y 287 en València.
Según el acuerdo entre la Generalitat y el Ministerio que dirige Raquel Sánchez, las viviendas financiadas con cargo a este programa solo podrán ser arrendadas a personas que vayan a tenerlas como su domicilio habitual y permanente. Se priorizará, además, el criterio social. Así, los arrendatarios no podrán superar en 4,5 veces el IPREM -unos 2.605 euros mensuales- y con condiciones especiales para personas con discapacidad y familias numerosas. Adicionalmente, las personas arrendatarias deberán estar inscritas en el Registro de demandantes de Vivienda de la Comunitat Valenciana.
En cuanto a los precios, se ha fijado un máximo de 7,5 euros por metro cuadrado útil al mes, aunque sujeto a actualización conforme a lo que se establezca por el pliego del concurso. Asimismo, habrá un tope de 4,5 euros por metro cuadrado útil al mes de plaza de garaje, de trastero o de cualquier otra superficie adicional anexa a la vivienda. Eso sí, los garajes y trasteros que tengan la consideración de no vinculados podrán arrendarse en condiciones de mercado.
