VALÈNCIA. Ya se sabía: las grandes empresas de telecomunicaciones se disputaban la contrata del Ayuntamiento de València del 'internet de las cosas', la telefonía fija y móvil y los datos. Así pues, de las tres empresas que se presentaron a la licitación pública, Telefónica, Orange y Vodafone, la tercera es la que más puntos ha obtenido, según el acuerdo aprobado por la Junta de Gobierno Local del pasado viernes.
El Ayuntamiento de València adjudicará en breve el contrato por un presupuesto de 1,6 millones de euros en total, un 11,16% más que el contrato anterior. Por ahora, el gobierno ha requerido a la empresa mejor puntuada, Vodafone, la documentación necesaria para constatar el cumplimiento de los requisitos para resultar finalmente adjudicataria del contrato. Cuando lo haga y se compruebe que todo está en regla, se dará este último paso.
El contrato viene a recoger lo que antes se hacía mediante dos concursos públicos: por un lado la red de telefonía móvil, y por otro lado la red de telefonía fija y los datos. Servicios que ahora se unifican en una licitación como dos lotes diferenciados y adhiriendo, además, otro lote adicional: lo que técnicamente se llaman comunicaciones Machine to Machine ('el internet de las cosas'), que en términos llanos se refiere a la interconexión entre objetos y herramientas comunes. Vodafone ha resultado la mejor oferta en los tres lotes.
El 'internet de las cosas' se trata de un tipo de conectividad cada vez más necesaria toda vez el Ayuntamiento está poniendo en marcha diferentes servicios que utilizan este tipo de red. Contenedores inteligentes, luminarias, sensores de ruido y medioambientales, sensores de aparcamiento, etcétera, son algunos de esos ejemplos. En total, actualmente el consistorio controla cerca de 2.150 dispositivos. El concejal de Agenda Digital y Administración Electrónica, Pere Fuset, afirma que el hecho de que "el nuevo contrato de telecomunicaciones se abra al internet de las cosas nos será de gran ayuda para consolidarnos como smart city conectada".
La contrata también incluye los servicios de internet y de datos. Y en este contrato, destaca que los pliegos obligarán a asegurar una buena cobertura de internet en los edificios municipales de las pedanías. Para ello se hará una conexión con fibra óptica hasta el equipo que se instale en cada una de las sedes.
La concejala de Gestión de Recursos, Luisa Notario, destaca que, como mejora, se ofrece la conexión mediante fibra óptica en los edificios municipales de los pueblos de Benifaraig, Benimàmet-Beniferri, Borbotó, Carpesa, les Cases de Bàrcena, Castellar-l'Oliveral, el Palmar, el Saler, Forn d'Alcedo, la Punta, la Torre, Massarrojos y el Perellonet. Según Fuset, "con la fibra ya presente en estos núcleos, y otros que vendrán, tendremos elementos potentes para reforzar la estrategia con que este ayuntamiento quiere hacer entender a las empresas de telecomunicaciones la necesidad de satisfacer la demanda del vecindario".
Ahora bien, faltan en la lista algunos pueblo: Poble Nou y Pinedo. Allí la empresa no ha ofrecido estos servicios. Sin embargo, según explica Fuset, la intención es reunirse con empresas del ramo para colaborar en aras de solucionar esta carencia. De hecho, una empresa ya se ha puesto en contacto con el consistorio con esta finalidad.
Pero más allá de las pedanías, la firma que salga adjudicataria -previsiblemente Vodafone- tendrá que garantizar el correcto funcionamiento de 550 líneas móviles de todo tipo que cada año realizan más de 900.000 llamadas y videollamadas, y más de 400.000 mensajes El 30% de los móviles que ofrezca la compañía deberán ser de gama alta: Iphone X o Samsung Galaxy 10 "o equivalentes de prestaciones iguales o superiores". El restante 70% serán smartphones de gama media.
Por otro lado, Vodafone deberá dar cobertura de telefonía fija a toda una red que anualmente sostiene 1,3 millones de llamadas practicadas desde casi 3.500 extensiones de línea municipales y de los organismos dependientes. La concejala de Recursos del Ayuntamiento de València, Luisa Notario, aseguró en su momento que este contrato es "un cambio de paradigma respecto a la conceptualización de las comunicaciones municipales, conectando los espacios, a las personas y los dispositivos, garantizando una buena conectividad y los servicios de telecomunicaciones necesarios en los servicios municipales".