VALÈNCIA. El Ayuntamiento de Xàtiva ha dado luz verde a unas nuevas cuentas para el próximo año. En total, el presupuesto para 2022 asciende a 28,96 millones de euros, esto es, 4,3 millones de euros menos que el año anterior. Sin embargo, la propuesta del equipo de gobierno para las finanzas municipales del próximo ejercicio no ha contado con el apoyo de ninguno de los dos grupos de la oposición, Xàtiva Unida y Partido Popular, que han votado en contra.
Incluso el socio de gobierno del PSPV-PSOE en el ejecutivo local, Ciudadanos, tampoco los ha apoyado. En este caso, según han explicado, el regidor naranja, Juan Giner, no pudo asistir al pleno en el que se votaban las cuentas "por motivos personales". Aun así, el distanciamiento de ambos socios de gobierno se ha hecho evidente en los últimos meses, por ejemplo, con la abstención ante las ordenanzas fiscales de Giner, quien actualmente se encarga del área de movilidad y seguridad ciudadana.
Esta crisis de gobierno se empezó a hacer evidente tras la salida de Maria Beltrán, hasta entonces regidora de Ciudadanos, del grupo político y su baja como afiliada a finales de septiembre. Según explicó en un comunicado, consideraba que dentro del partido "no podré expresar lo que quiero para mi ciudad con los criterios que siempre me han caracterizado". Además, Beltrán señalaba que hasta entonces había respetado la disciplina de voto, pero que "la situación ha llegado a un punto en el que no hay otra salida".
"Se toman decisiones sin contar con mi opinión", criticaba la edil en su carta, coincidiendo con el alejamiento de Giner de las propuestas realizadas por el equipo de gobierno y su anuncio de que al final de la legislatura dejaría la política. De hecho, Beltrán dejó claro en su comunicado "que no hay ningún hecho objetivo para dejar de dar apoyo al gobierno". Así pues, tras pasar al Grupo de No Adscritos y conservar sus competencias en Fallas y Teatro, ha sido la única regidora, aparte de los socialistas, que ha votado a favor de los presupuestos para 2022.
Pese al escaso apoyo recibido, el regidor de Hacienda encargado de su elaboración, Ignacio Reig, ha destacado "el trabajo previo con las asociaciones de vecinos y con el resto de grupos políticos que se han materializado en algunas peticiones incluidas". De hecho, ha asegurado que todos los grupos políticos han aportado propuestas "excepto el Partido Popular", y ha lamentado que "a pesar de ello todos hayan votado en contra de este documento".
En materia económica, el presupuesto aprobado para el próximo año tiene un espíritu centrado en la consolidación de las inversiones iniciadas en 2020 y 2021. Aunque es inferior al del año pasado, Reig ha destacado "la apuesta por los servicios públicos" que incluye el programa Bienestar Social 2022-2025 y que asciende a 1,7 millones de euros cada año. Así, también contempla un nuevo contrato de limpieza de edificios públicos de 1,2 millones de euros, el incremento de partidas como la destinada al deporte que en su conjunto supera el millón de euros, a la educación infantil de 0 a 3 años que alcanza los 200.000 euros, o a la memoria histórica que contempla unos trabajos juntos a la Diputació de València por valor de 10.000 euros. Todo ello supone, según el edil de Hacienda, que el departamento de Bienestar "sea la primera partida del presupuesto".
Entre las inversiones previstas se encuentran las destinadas a la seguridad ciudadana y a la redacción el proyecto de un futuro parque de educación vial, que ascienden a casi 100.000 euros, la fase VII del Plan de Seguridad de Vías Urbanas contará con 80.000 euros, o los 120.000 euros que se destinarán a la adquisición de terrenos para la vía verde entre Xàtiva y Carcaixent. La mejora de las vías públicas de Bixquert, con una partida de 52.000 euros; o de algunas calles del casco antiguo con otros 93.253 euros son algunas de las inversiones previstas en urbanismo.
Los trabajos de mejora en la red de aguas también destaca en el apartado de las inversiones: 132.000 euros para el casco antiguo y el canal de Bellús, y otros 110.000 para la potabilización del agua del Carraixet, tras la reciente adquisición por parte del ayuntamiento del pozo privado. Pero, sin duda, la inversión más destacada económicamente será la prevista para la rehabilitación del antiguo Convento de Santa Clara, donde se ubicará el Centre Raimon d'Activitats Culturals, con una inversión de 700.000 euros anuales los próximos cuatro años que se suman a las aportaciones autonómicas y provinciales alcanzando los nueve millones de euros en total.
Otro de los protagonistas de las cuentas municipales del próximo ejercicio será la posible llegada de fondos europeos. “Aspiramos a poder cumplir la fase I del programa 'Moves' a través de los Fondos Europeos Next Generation, con una inversión de 350.000, mientras que en la fase II, de cara a 2023, Xàtiva podría aspirar a 1,35 millones”, ha indicado el regidor de Hacienda. A ello se suman las inversiones de la Generalitat Valenciana y la Diputació de València para el Centre Raimon, otros 2,4 millones de euros para la adecuación de la vía verde Xàtiva-Carcaixent, y 1,2 millones procedentes del Plan de Inversiones del ente provincial para los años 2022 y 2023. "El presupuesto está abierto a ampliarse en algunas partidas una vez lleguen los fondos correspondientes a otras administraciones", ha añadido Reig.
Entre las novedades de este presupuesto se incluye el recién reformulado impuesto de la plusvalía, tras el fallo del Tribunal Constitucional que eliminaba el anterior método de cálculo. Ahora, tras días de incertidumbre y coincidiendo con la recta final de la elaboración de los presupuestos, los consistorios ya conocen las nuevas opciones para calcular este tributo. Este cambio de última hora, sin embargo, afectará a las previsiones de ingresos. En concreto, en el caso de Xàtiva, el regidor de Hacienda ya ha estimado que ingresarán un 18% menos de lo previsto por la plusvalía, es decir, en lugar de 587.000 euros, recaudarán 480.000 euros.
Respecto al resto de ingresos a través de impuesto, Reig ha destacado la congelación de los impuestos, "lo que significa la reducción efectiva de la presión fiscal a pesar del aumento del precio del IPC". En este sentido, el alcalde de Xàtiva, Roger Cerdà, ha destacado que llegan "en un momento en que todo está subiendo, con la voluntad de la reactivación económica y de que las familias no tengan que asumir también una subida en el coste de los servicios que se prestan por parte del ayuntamiento".
"Siempre he insistido en la mejora de la gestión de los ingresos, y por primera vez puedo decir que esta materia ha mejorado mucho", ha asegurado el edil encargado del área de Hacienda. Entre los ejemplos que ha señalado se encuentra el aumento de recaudación en el Castell que se ha doblado respecto al año anterior y ha supuesto 310.000 euros de ingresos para el consistorio. "Por primera vez el Castell es una fuente de ingresos en lugar de una fuente de gastos", ha admitido Reig. La mejora en la red de agua potable también ha permitido al consistorio recaudar un 20% más que el año anterior hasta superar el millón de euros, así como otros impuestos empresariales y urbanísticos que se han incrementado en torno al 12%. Además, para el año 2022 la administración local volverá a implantar la tasa de ocupación de vía pública para las terrazas de bares y restaurantes.
Eso sí, el edil encargado de las cuentas ha puesto el acento en la importancia de ejecutar al máximo posible las inversiones previstas en el presupuesto que casi alcanzan los 14 millones de euros. "En lo que queda de legislatura hay tres obras importantes que tendrán que ir ejecutándose: el nuevo colegio Pla de la Mesquita, el nuevo pabellón deportivo y las obras de ampliación del IES Josep de Ribera", ha explicado. "Estas cuentas demuestran la clara voluntad de reactivación económica, la posibilidad de la llegada de fondos europeos por la buena situación económica y la voluntad de ejecución máxima de todos estos presupuestos en el mínimo tiempo posible", ha concluido Cerdà.