CASTELLÓ. La segunda jornada de huelga en el sector cerámico, convocada por los sindicatos UGT y CC.OO. en protesta por el bloqueo en la negociación del convenio colectivo ha arrancado con un seguimiento similar a los paros del pasado miércoles, según los sindicatos. "El respaldo a la huelga está siendo similar al miércoles, con un 80% de parón en la producción total, alcanzando el 100% en algunas empresas", han indicado desde CC.OO.
Un seguimiento que, nuevamente, diverge de los datos facilitados por la patronal Ascer que, no obstante, constatan que la segunda jornada de paro ha comenzado con más seguimiento que la primera. Así, desde la patronal han informado que, en el turno de mañana, "el 9% de trabajadores que debían incorporarse a trabajar han secundado la huelga. El restante 91%, se han incorporado a su puesto de trabajo". Asimismo, han recordado que el pasado 28 de febrero, el seguimiento en el turno de mañana fue del 7,5%.
El secretario general del Sindicato Intercomarcal Hábitat CCOO Comarques del Nord, Jordi Riera, por su parte, insiste en que "el paro en la producción está siendo del 80%" y defiende la necesidad de retomar la mesa de negociación.
Cabe recordar que el último encuentro entre patronal y sindicatos tuvo lugar el día anterior a la primera jornada de paro. En dicho encuentro, la patronal presentó una nueva oferta que causó división entre los sindicatos y no logró frenar la huelga. La patronal planteó hasta tres propuestas de mejora. CCOO apostaba por seguir conversando mientras UGT rechazó los últimos cambios y se levantó de la mesa. No obstante, las organizaciones sindicales descartaban desconvocar la huelga aunque se acercaran posiciones en el convenio.
Previamente, en la reunión en el Tribunal de Arbitraje Laboral, la patronal planteó pactar una subida salarial de un 2,5 % limitándola solo al año 2023 y aplazando las tablas salariales de 2024 y 2025. CCOO y UGT se negaron por ser el alza inferior al IPC (3,1 %) y no contener los tres años del marco colectivo. Desde los sindicatos explican que no aceptarán ninguna propuesta que suponga la pérdida de poder adquisitivo.