Stadler Valencia y los sindicatos se acercan al acuerdo laboral

VALÈNCIA. Stadler Valencia y y su comité de empresa han acercado posturas en la negociación del nuevo convenio laboral de la compañía. Según detallan a Valencia Plaza fuentes sindicales, la dirección de la fábrica de trenes y locomotoras de Albuixech ha cedido terreno en los asuntos controvertidos que bloqueaban la negociación: la intención de la multinacional de incrementar las horas obligatorias y la de reducir los salarios.

"Existe voluntad para que se mantengan las horas extra como voluntarias, para que, como ha ocurrido hasta la fecha, los trabajadores respondan cuando la empresa lo necesite. Además, la dirección también parece dispuesta a reconocer el IPC real anual, de modo que se han desbloqueado bastante las negociaciones", explican.

En esta línea, la plantilla rehusó a realizar la manifestación convocada para el pasado día 28, y se plantea hacer lo mismo de cara a la prevista para este viernes. No obstante, todavía quedan muchos flecos por resolver.

Según agregan las mismas fuentes, el convenio que propone la empresa tendría una vigencia de 6 años, una cantidad muy superior a lo habitual. Sería incluso más largo que el de Ford Almussafes, considerado uno de los más extensos de la industria valenciana con una duración de 5 años.

El objetivo de Stadler sería el mismo que el de la multinacional automovilística: lograr un escenario laboral estable para un importante periodo de tiempo. Pero los trabajadores ven con cierto recelo esta circunstancia y están revisando al detalle cada fleco ante la posibilidad de que, como pretende la dirección, el muevo marco laboral acordado se prolongue durante 6 años.

Derrota en la Audiencia Nacional

Por otra parte, tal y como publicaba este miércoles la edición valenciana de Expansión, la compañía ha sufrido un duro varapalo por parte de la Audiencia Nacional. El tribunal ha cambiado de criterio y, tras dos fallos a favor de la empresa, ha rectificado y ha declarado nulo el gran contrato que la compañía (entonces Vossloh España) firmó en 2010 con la firma pública Ferrocarriles de Vía Estracha (Feve) para el suministro de trenes.

La Audiencia considera ahora que el proceso de contratación contuvo "graves irregularidades". El contrato, según la sentencia, se amplió en 28 unidades tras su adjudicación sin publicidad y se disparó por encima de los 70 millones de euros. La intención de Stadler es presentar un recurso de casación en defensa de sus intereses. Reclaman 19 millones de euros como indemnización.