La compra del inmueble se ha realizado mediante adquisición directa, procedimiento previsto en la Ley de Patrimonio de la Generalitat para aquellos casos en los que quedara justificada la emergencia habitacional y la existencia de demanda de vivienda pública y la carencia de parque público de vivienda en la ciudad de València, como es este caso.
Según la Generalitat, con esta adquisición se consigue cerrar un proceso que tenía en vilo a 91 familias arrendatarias cuyos alquileres, sujetos al Plan Estatal de Vivienda y Rehabilitación 2009-2012, finalizaron el pasado 4 de marzo, aunque finalmente la propiedad hizo una prórroga excepcional de los arrendamientos hasta el 11 de septiembre.
Asimismo, se incorporan las 33 viviendas restantes al parque público de vivienda para su posterior adjudicación, de forma que con la adquisición del inmueble por parte de la Generalitat "se asegura que estas viviendas sigan cumpliendo su función social".