VALÈNCIA. El pasado día 20 de diciembre finalizó el plazo para que los aspirantes para dirigir À Punt formalizaran sus candidaturas. Tal y como informó Valencia Plaza, la Corporació Valenciana de Mitjans de Comunicació (CVMC) recibió un total de nueve solicitudes de otros tantos hombres: Pere Valenciano, Pepe Crespo, Artur Balaguer, Paco Picó, Pau Vergara, Alfred Costa, Juli Esteve, Paco García Donet y Germà Arroyo. La actual responsable del ente, Empar Marco, no figuraba entre los inscritos.
No obstante, todavía quedaba abierta la posibilidad de que tanto la actual directora como otros aspirantes pudieran haber enviado su solicitud por correo certificado que, como tarde, debía estar cuñado ese mismo viernes antes de que expirara el plazo fijado.
Desde entonces, el silencio ha reinado por parte de Marco y su entorno más próximo. Aunque casi todo el mundo -partidos y Consell- da por hecho que ha optado por no presentarse, la periodista no ha confirmado públicamente su decisión ni tampoco ha respondido a las llamadas de este periódico ni, al parecer, de ningún otro medio de comunicación.
Ahora bien, fuentes de Correos recalcan que un carta de esas características tardaría en llegar a su destino dos y tres días laborables como mucho, mientras que ya han transcurrido 13 días, entre los que constan cinco hábiles para entregas del servicio postal, descontando los fines de semana, festivos y los días 24 y el 31 de diciembre, en los que no hay reparto.
¿Puede descartarse que Marco se haya presentado y la solicitud llegue en las próximas horas? Nada es imposible, pero lo cierto es que el grueso de los relacionados en el proceso coinciden en que la directora de À Punt ha tomado la decisión de no concurrir sin hacerlo público y sin responder no solo a los medios de comunicación, sino a los propios responsables de la Corporació Valenciana de Mitjans de Comunicació.
Esto tampoco significa, tal y como informó este diario, que la citada responsable del ente público valenciano vaya a dejar necesariamente su puesto después del próximo 8 de marzo, que es cuando vence su mandato de tres años. Si no existe un consenso en el Consejo Rector y su correspondiente ratificación en Les Corts, Marco seguiría en su puesto hasta que se produjera el quórum necesario. Algo que puede llevar semanas o incluso meses.
Más aún cuando desde Compromís ya han mostrado reticencia respecto a la sintonía de varios de los candidatos con su socio en el Consell, el PSPV de Ximo Puig. Una circunstancia que podría llevar a la coalición valencianista a bloquear el relevo de Marco al considerarla mejor opción que cualquiera de las que podrían apoyar los socialistas. Un hecho que, desde el entorno del presidente de la Generalitat, no hace más que confirmar que la actual directora de À Punt es con la que Compromís se siente más cómodo.