Imagen de la piscina del Resort Magic Agua Excalibur. BENIDORM. Los alojamientos rurales son los únicos que eliminaron plazas en la Comunitat Valenciana durante el 2016. Esto se desprende de los cuatro documentos que analizan la evolución de estas empresas turísticas que ha elaborado la Agencia Valenciana de Turismo. El número de alojamientos en hoteles se incrementó en un 1,6% respecto a 2015, en campings fue de seis establecimientos más, y la subida más fuerte la obtuvo el sector de los apartamentos turísticos, con un 15,2% más, en la que puede haber influido la adhesión de los que funcionaban de forma "alegal". Sin embargo, el dato negativo lo registra el alojamiento rural, que cerró cuatro establecimientos y rompe con la dinámica positiva del resto del sector.
Estos datos tienen una consecuencia directa, la pérdida de empleos: 1.352 personas trabajaron en alojamientos rurales de la Comunitat. Este volumen constituye el 6,7% del personal empleado en alojamientos colectivos y la cifra fue un 1,6% inferior a la que se registró en 2015.
Durante el año pasado, el grado de ocupación medio anual por plazas para el total de la Comunitat Valenciana en el turismo rural fue del 11%, un nivel prácticamente igual al de 2015. No obstante, los datos durante los fines de semana fueron significativamente superior a la media global, ascendiendo al 20,1%, ligeramente superior a la que se registró en 2015.
La estancia media es de tres días, por lo que "se constata como el alojamiento rural se emplea principalmente como modalidad elegida para pasar estancias breves, como fines de semana o puentes", recoge el informe.
Al contrario de lo que ocurrió en el turismo rural, el número de campings abiertos fue de 109, seis más que en 2015. Esto se tradujo en el aumento del número de plazas a 70.080 y el número de parcelas a 22.024, subiendo un 2,4%, siempre respecto al año anterior.
El grado de ocupación medio anual por parcelas fue del 54,94%, aumentando un 6% y la ocupación en fin de semana alcanzó el 54,46%, un 6,5% superior a la del año anterior. Mientras que la estancia media fue ligeramente inferior, con 8,9 días.
Los buenos datos se reflejaron también en el empleo, con 1.051 personas en campings de toda la Comunitat. Este volumen constituye el 5,3% del personal empleado en alojamientos colectivos y la cifra fue un 10,2% mayor a la que se registró en 2015.
Benidorm. Foto: FRAN MERCADER.En cuanto a los apartamentos turísticos, aumenta en todos las estadísticas, salvo en la ocupación, que pierde un 1,7% con respecto a 2015, y llegó al 27,30% de media anual. La ocupación por plazas en fin de semana fue del 29,6%, inferior en un 1,1% a la registrada durante el año anterior y la estancia media se quedó igual, en 6,9 días.
Pero no todo son malas noticias, permanecieron 21.155 apartamentos abiertos, un 15,2% más que en 2015, con una capacidad media de 103.978 plazas, 16,7% más que el año anterior. La oferta de plazas en apartamentos turísticos de la Comunitat supuso el 16,9% de la oferta total española en esta modalidad, siendo el segundo destino con mayor oferta de plazas tras Canarias.
En relación a la evolución del empleo, trabajaron 2.864 personas en apartamentos de la Comunitat, lo que supone el 14,4% del personal empleado en alojamientos colectivos. Como resultado, fue un 14,1% superior a la que se registró en 2015.
A diferencia de los documentos elaborados para analizar los campings, apartamentos y alojamientos rurales, la Agencia Valenciana de Turismo obvia hablar del número de trabajadores que emplea el sector hotelero. El resto de parámetros sí que los mencionan, y como viene siendo habitual, destaca por ser el sector que más visitantes acoge. El número de plazas fue de 121.961, un 1,6% más respecto a 2015.
Es más, durante los meses de temporada baja se mantuvo un porcentaje de plazas abiertas del 83,3% respecto a la media de temporada alta. Mientras que la oferta hotelera de la Comunitat supuso el 8,4 % del total de las plazas ofertadas en el conjunto del país.
Aunque no consta en qué se refleja todo esto en el empleo, sí que le dedican un espacio más largo a la ocupación que registran estas empresas. Así, el grado de ocupación por plazas estiman que fue del 60,36%, situándose un 3,8% por encima de los niveles de 2015. En el fin de semana se situó en el 66,21%, porcentaje superior en 1,8 puntos al registrado en 2015.
Si tenemos en cuenta la categoría de los establecimientos hoteleros, los hoteles de 4 y 3 estrellas son los que tuvieron los mayores niveles de ocupación, un 62,69% y 67,31% respectivamente, seguidos por los de dos estrellas con un 54,07%. Asimismo, indican que los hoteles de todas las categorías tuvieron una evolución positiva, a excepción de los de 5 estrellas y 1 estrella, que tuvieron respectivamente un leve descenso de 0,4% y 0,1%.
Es precisamente el informe sobre la situación hotelera el último en hacerse público, a la espera de que finalicen los análisis detallados por provincia, así como el que pone en el punto de mira la excelencia turística.
Benidorm. Foto: RAFA MOLINA No obstante, dan un primer avance de las zonas más importantes de las provincias. Así, el número de viajeros creció un 3,3% en Benidorm, y el de pernoctaciones un 4,3%. La demanda extranjera creció un 10%, mientras que la española disminuyó un 1,8%, algo por lo que llevan meses preocupados desde la patronal hotelera Hosbec. La capital de la Costa Blanca es el segundo punto turístico español (tras Madrid) en número de pernoctaciones de residentes en España. La
ocupación hotelera llegó al 78,24%, un 1,5% más y el número de plazas ofertadas, 38.152, fue un 1,3% superior a 2015.
También hace mención al litoral de Alicante sin Benidorm: creció un 10,1% en viajeros y un 12,1% en pernoctaciones. En este caso, sí que creció la demanda nacional (9,8%), así como la extranjera (15%). El grado de ocupación medio anual por plazas fue del 59,21% y se incrementó un 13,6%. El número de plazas abiertas, 24.989, creció un 0,6%.
Por su parte, en el interior de la provincia de Alicante creció un 2,8% en número de viajeros y un 6,1% en pernoctaciones. Aquí también creció la demanda española, en esta ocasión en un 11,2%. Por el contrario, la extranjera disminuyó un 0,5%. El grado de ocupación, 30,51%, se incrementó un 12,7%; por otra parte, la oferta de plazas, (4.151) creció un 3,6%.
