BARBARROJA. En un valle paralelo, con casas diseminadas por toda su superficie, mucho más estrecho que la que extensión del resto de la Vega Baja Vega Baja y a mucha más altitud, se encuentra a 407 metros sobre el nivel del mar la pedanía oriolana de Barbarroja. Este valle paralelo lo custodia el cerro del Agudo a 734 m de altitud y la peña La Mina, de la sierra de l'Algajat. Paisaje, lengua materna, tipo de cultivos y sentimiento de arraigo a una comarca. Una realidad distinta a los elementos e idiosincrasia que se le ha otorgado a una Vega Baja de por sí heterogénea. Desde el lunes cuenta con otro distintivo. Es la única parte de la Vega Baja que sigue en la fase 0 de la desescalada del confinamiento por la pandemia de la covid-19.
Se mantiene en la fase inicial todavía porque pertenece al área de salud de Elx-Crevillent y su hospital de referencia es el del Vinalopó. Desde que un cartel inidica el término municipal de Barbarroja en la CV-845 hasta que aparece el de la región de Murcia tan solo discurren 700 metros. En dirección contraria, el pueblo más cercano está a tres kilómetros, Hondón de los Frailes y el centro administrativo y legislativo de esta pedanía, el ayuntamiento de Orihuela, a 32 kilómetros. "No nos sentó mal que toda la Vega Baja pasara a la fase 1 y nosotros no, ni envidia ni nada, porque tenemos asumidos que estamos en Elche" señala el alcalde pedáneo, Antonio Galiana. En el aspecto sanitario, cultural y geográfico Barbarroja forma parte del Medio Vinalopó, solo le une al Bajo Segura la adscripción administrativa con Orihuela.
Con 98 personas censadas y con un gran porcentaje de personas procedentes de otros países, el confinamiento no ha incidido tanto como en otros municipios. El no pasar a la fase 1 tampoco. La mayoría de la actividad económica se basa en la agricultura, almendros y viñedos. El único establecimiento que ha detenido su actividad es el vivero y jardinería que hay junto a la iglesia. Una iglesia que desde que se decretó el estado de alarma y al no pasar a la fase 1 tiene suspendida su liturgia, programada para los sábados. Junto a ella se encuentra la consulta médica, también suspendida. Antes se hacían todos los miércoles.
Las directrices ante la pandemia y la desescalada indican que no se puede cambiar de provincia -lo más cercano a Barbarroja es la región de Murcia- ni de área sanitaria, salvo las excepciones que recoge el protocolo. El alcalde pedáneo preguntó a la Guardia Civil si las personas que habitan en esta pedanía pueden desplazarse hasta Albatera, a 18 kilómetros, para hacer la compra. Dadas las circunstancias sí se lo permiten.
El resto de la comarca tampoco se puede desplazar por todos los municipios. La desescalada en la Comunitat Valenciana se dividió por áreas sanitarias. Almoradí, Albatera, Callosa de Segura, Algorfa, Benejúzar, Benferri, Bigastro, Catral, Cox, Daya Nueva, Daya Vieja, Dolores, Granja de Rocamora, Jacarilla, Redován, Rafal y Orihuela pertenecen al área 21 de salud de la Generalitat, la de Orihuela. Esta área acoge a 168.148 personas. Según los datos que muestra la Consellería de Sanidad, se han contabilizado 185 positivos de covid-19 y han fallecido 18 personas. En la otrá área, la 22, se aglutinan los municipios de Torrevieja, Benijófar, Formentera, Guardamar del Segura, Los Montesinos, Pilar de la Horadada, Rojales, San Fulgencio y San Miguel de Salindas. Esto significa una población de 186.025 personas. En cuanto a positivos, se han registrado 448, y han fallecido 52 personas.
En la área que corresponde a Barbarroja, Elx-Crevillent, que engloba a una población de 156.506 personas, los positivos registrados ascienden a 209 y 9 fallecidos.
Una de las paradojas que deja el término municipal de Orihuela es que otra de sus pedanías, Torremendo, forma parte de la área de Torrevieja, igual que Orihuela Costa. Aunque ambas áreas hayan pasado a la fase 1, solo está permitida la circulación entre los municipios de la misma fase. Esto supone que los oriolanos que residan en estos dos enclaves no pueden desplazarse por todo el término municipal de Orihuela.
Esta situación ha puesto uno límites geográficos que hasta el momento parecían inexistentes y carentes de relevancia: una comarca, dos fases distintas de desescalada y tres áreas sanitarias.