CASTELLÓ. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha argumentado su decisión de validar la anunciada adquisición del 50% de Argenta Cerámica y de Cifre Cerámica por parte de Nomar Patrimonial -la sociedad matriz de Pamesa presidida por el empresario Fernando Roig- en que esta operación no representa "amenaza" para un mercado como el de la cerámica, "muy fragmentado con escaso grado de concentración".
Para la CNMC, esta operación a tres bandas conlleva solapamientos horizontales de escasa importancia en el mercado europeo, mientras que en el nacional, estos solapamientos son algo mayores, si bien se trata de un mercado que aún tiene un número significativo de compañías que mantienen una posición relevante, prácticamente todas ellas radicadas en la provincia de Castellón. Además, según el informe publicado por el órgano regulador, hay un exceso de capacidad instalada y existe facilidad de cambio de proveedor, por lo que entiende que la operación es plenamente asumible por el mercado.
Competencia autorizó en una primera fase la operación, por la que Nomar Patrimonial (Pamesa) adquiría el 50% de Argenta Cerámica y de Cifre Cerámica. El holding liderado por Roig, opera en el mercado de la producción y venta de cerámicas, en particular, de baldosas y azulejos de cerámica en Castellón, mientras que Argenta y Cifre son empresas familiares localizadas en esta misma provincia, dedicadas a la fabricación del mismo tipo de productos. La adquisición de ambas empresas por parte de Nomar se encontraba interrelacionada, por lo que ha sido analizada por la CNMC como una única operación.
Este movimiento, según la argumentación de la propia CNMC, tampoco da lugar a solapamientos verticales o efectos cartera significativos, dado que la entidad resultante no contará con un poder de mercado de enorme relevancia en ninguno de los segmentos en los que opera, además de que existen aún alternativas suficientes para asegurar la competencia.
Con todos estos pormenores, la CNMC ha considerado que esta concentración a cargo de tres grandes empresas cerámicas castellonenses no supone una amenaza para la competencia en los mercados afectados, según sentencia.