DÉNIA. Dénia, Gandia y Oliva mantendrán el frente común de presión al Ministerio de Fomento para que la conexión ferroviaria entre las dos comarcas sea una realidad en el medio plazo y vaya cumpliendo las distintas fases previstas en el estudio de viabilidad del tren de la Costa, cuya primera fase ya se ha incluido en el Plan de Mejora de las Cercanías presentado esta semana por el titular de Fomento y el jefe del Consell, Ximo Puig.
Así lo han anunciado los tres primeros ediles en una rueda de prensa celebrada en el Ayuntamiento de Dénia, como una prueba del apoyo para el conjunto del proyecto de los responsables políticos de Oliva y Gandia, David González y Diana Morant al de Dénia, "por su altura de miras" al luchar aunque todavía el tren está lejos de la Marina Alta. Un proyecto de cuya evolución piden estar al tanto a través de la información que facilite la Conselleria de Territorio y Vivienda que es la que “participará en las reuniones de la comisión de seguimiento del plan de inversión” que se creará.
El primer tramo que supone la conexión entre Gandia y Oliva está dentro de se plan, dotado con 121 millones de euros y otro también importante es la duplicación de la vía entre Cullera y Gandia, este tendrá un coste de 134 millones de euros. Y a estas cifras ha sido una de las cosas que se ha referido el alcalde de Oliva, David González, ya que eso “es un compromiso que va más alla al hablar de ya de un presupuesto”. González ha indicado además que esta “es la primera etapa de una carrera de fondo” y que la llegada del tren a Dénia “está a 8 kilómetros menos”.
El alcalde de Oliva ha explicado las diversas negociaciones “a todos lo niveles” que tanto él como los otros dos alcaldes abrieron para que el plan, anunciado en octubre por el Ministerio, incorporara la primera de las fases, ya que en un principio el Ministerio solo incluyó la duplicación entre Cullera y Gandia. “Hicimos toda una serie de gestiones al más alto nivel, alcaldes, partidos políticos, Consell y sociedad civil, para algo que no era fácil pero que al final se consiguió, fue una alineación de todos” que culminó con el anuncio realizado por el ministro de la Serna el lunes.
Por su parte, la alcaldesa de Gandia, la socialista Diana Morant, ha afirmado que ahora “hay dos retos”, el primero hacer que se cumpla el compromiso y “que no se quede sobre el papel” y el segundo “reclamar el objetivo final: que el tren llegue a Dénia y no se quede en Oliva”.
Morant se ha referido al cambio de actitud del Gobierno motivado por el relato que ha construido tanto el Govern del Botànic como los alcaldes y la sociedad de las dos comarcas “para superar el contexto de que este tren no era rentable ni social ni económicamente” (como así recogía el Estudio de viabilidad encargado por el Ministerio de Fomento) y ahora “se haya incluido en la planificación de infraestructuras”.
Mientras, el alcalde de Dénia, ha indicado que “por primera se ha oído la voz del gobierno valenciano en Madrid” y calificó como alcanzar “una meta” que el trazado entre Gandia y Oliva se vaya a poner en marcha. No obstante, de la misma manera que hizo en la manifestación del pasado sábado en Oliva, volvió a insistir en que ahora esto “debe plasmarse en los presupuestos generales del Estado” y “firmaría que el tren llegase en diez años” a la Marina Alta.