Instalaciones de Extrusax en el polígono de Sax junto a la A-31ALICANTE. La empresa de perfilados de aluminio Extrusax (Extrusión de Sax SL) sigue inmersa en una espiral de crecimiento gracias al buen comportamiento de la demanda exterior. La firma, creada en 2006 y participada al 50% por el grupo Giménez Ganga (que, no obstante, no toma parte en su gestión y se limita a su papel de socio capitalista) y los empresarios Antonio Gómez Ramos y Jorge Gómez, cerró el ejercicio 2017 con un incremento superior al 20% en su facturación, y para el ejercicio 2018 las previsiones del informe de gestión apuntan a un crecimiento del 50%.
Así, según las cuentas anuales de 2017 depositadas en el Registro Mercantil, Extrusax alcanzó un volumen de ventas de 73,4 millones de euros, un 21% más que en 2016, cuando la cifra de ventas llegó a 60,3 millones. Ese año, el crecimiento sobre 2015 ya había sido del 12%. La mejora del negocio está directamente relacionada con el tirón de los sectores industrial y de la construcción, que suponen el 78% de las ventas, según el informe de gestión. Principalmente, Extrusax vende al extranjero: dos terceras partes de sus ingresos provienen del mercado exterior del aluminio.
"La mercantil ha ido incrementado su presencia en el mercado internacional desarrollándose en países como Alemania, Francia, Italia, Reino Unido, Bélgica y Holanda. La cifra de negocios se reparte, en la actualidad en un 33,45% mercado nacional y 66,55% mercado europeo", indica el informe de gestión. En cuanto a los sectores que compran su aluminio, destacan "construcción, industria, electrónica, renovables y transporte". La firma está especializada en la transformación de aluminio mediante extrusión, y fabrica y comercializa perfiles de aluminio, ventanas y elementos de carpintería metálica.
El incremento de las ventas impactó directamente en el resultado de la sociedad al cierre del ejercicio: Extrusax se anotó un beneficio neto de 3,5 millones de euros, cuando un año antes había sido de 2,76 millones (1,43 millones en 2015). En dos años, la sociedad ha doblado su beneficio. No obstante, en 2017 no repartió dividendo a cuenta, como sí hizo un año antes (500.000 euros).
El incremento del negocio ha llevado a Extrusax a abrir un segundo centro de producción, en la provincia de Murcia. La inversión, que se estaba ultimando en 2016, como adelantó Alicante Plaza, se materializó a lo largo del pasado ejercicio. Así, el informe de gestión destaca que "se ha acometido la adquisición de maquinaria e instalaciones de una empresa del sector por importe de 2,75 millones de euros en Murcia, así como el arrendamiento de las naves industriales donde la entidad transmitente ejercía la actividad de extrusionado de aluminio, lo que concede a la empresa de una capacidad de producción muy superior a la alcanzada hasta la fecha".
Cabe recordar que en 2015 Extrusax ya había ampliado sus líneas de producción en Sax. El crecimiento de la actividad se ha trasladado también a la plantilla. De esta forma, en 2017 la plantilla de la empresa sajeña se incrementó hasta alcanzar la cifra de 234 trabajadores, cuando un año antes tenía 158 empleados (125 en 2015). Al igual que los beneficios, el personal empleado por la firma prácticamente se ha doblado en dos años.
