CASTELLÓN. Hace dos años y medio que José María Carrillo dirige el día a día de Tastia Group, el grupo castellonense de restauración conocido por sus restaurantes de comida italiana Muerde la Pastas. Este barcelonés de 49 años aterrizó en Castellón después de labrarse un nombre en el sector de la restauración y franquicias, en el que estuvo 11 años al frente de Dunkin Donuts para España y Portugal, además de otros grupos.
Como CEO de Muerde la Pasta ha acometido un proceso de profesionalización de la compañía del que ya se comienzan a ver los resultados. Con el respaldo de los dos socios el grupo castellonense de alimentación vive últimamente un crecimiento exponencial.
-Tastia Group cerró 2017 con una facturación de más de 47 millones de euros. ¿Cómo acabó 2018 y cuáles son las previsiones para este año?
-Hemos cerrado 2018 con 80 millones de facturación y esperamos cerrar 2019 con 100 o 110 millones.
-Es un crecimiento importante…
-Tenemos tres divisiones de negocio. El corazón principal, la restauración, es Muerde la Pasta y este año vamos a abrir 17 restaurantes nuevos, tanto en locales propios como en franquiciados. Benfood, que es nuestra fábrica de productos alimenticios, con la que no solo suministramos al propio negocio de restauración, sino también a terceros, como Macro, Sodexho,… clientes que están dentro de Horeca o de la restauración organizada. Después tenemos otra división, un poco más pequeña, la de construcción, con Benworks, con la que construimos los locales propios, ofrecemos este servicio a franquiciados bajo el método llave en mano y también estamos empezando con terceros que tienen que ver con el mundo de la restauración.
-La apertura de 17 restaurantes en un año supone sumar más de un 50% de los actuales. ¿A qué se debe ese despegue tan importante?
-Cerraremos el año con 50 establecimientos. Tenemos un modelo de negocio único, un buffet ítalo-mediterráneo de all you can eat por un precio cerrado, donde entran nuestras 150 recetas, bebidas, postre e incluso café. Somos un concepto muy solicitado, sobre todo por público joven y familiar. Esto nos ha llevado a tener una media de facturación por establecimiento de dos millones y medio. Dentro de la restauración organizada esas cifras son bastante altas. El año pasado por nuestros restaurantes pasaron 5,3 millones de clientes, eso es una barbaridad.
-Son cifras al alcance de muy pocos, por ejemplo de las empresas de comida rápida americana, pero vosotros apostáis por algo totalmente diferente…
-Si. Nuestro producto es de bastante calidad. Además, lo hacemos nosotros mismos en nuestra fábrica de Benfood. Desde la pasta o la masa de las pizzas hasta los postres, todo son recetas nuestras. En el pasado nos abastecían proveedores terceros, pero el I+D era muy lento. La forma de mejorarlo era haciendo nosotros mismos el producto y así la toma de decisiones en cuanto al producto se agiliza muchísimo.
"empezamos con las franquicias en 2018 con autogrill y este año ya tenemos firmadas las próximas 11"
-De los 17 restaurantes, algunos son a través de franquicias. ¿Cuándo habéis comenzado a trabajar bajo este sistema?
-Empezamos en 2018 y nuestro primer franquiciado es un grupo muy potente, Autogrill. Estamos con ellos en la estación de Santa Justa en Sevilla. Vamos a abrir dos más, en el centro comercial El Saler y Sant Boi, en Barcelona, y ya tenemos firmadas las próximas 11 franquicias para este año.
-¿Qué perfil tienen los franquiciados?
-El perfil de nuestros franquiciados son clientes que provengan del sector de la restauración, que ya tengan una o varias franquicias o de retail y evidentemente con el capital necesario para la inversión, ya que la necesaria para nuestros establecimientos es de un millón de euros.
-Hasta ahora estabais muy enfocados a centros comerciales. ¿Seguís en esa línea o Muerde la Pasta está diversificando espacios?
-Estamos buscando nuevas opciones. La prueba es que el año pasado abrimos nuestro primer restaurante en calle, que es el antiguo cine Capitol de València. Nos hemos quedado todas las instalaciones, de 3.000 metros cuadrados, y hemos abierto un Muerde la Pasta, un restaurante que se llama Abbiocco, con servicio en mesa; y una cafetería, Savoiardi. Ahora estamos buscando más locales en calles en toda España.
-¿Abbioco y Savoiardi ya los habíais implantado en algún otro lugar antes que en València?
-No. Los hemos creado porque teníamos la necesidad de ocupar 3.000 m2, un espacio muy grande para un Muerde la Pasta, y la zona nos daba lugar para implantar un concepto diferente con el que diversificar el espacio. Así, tenemos un buffet libre, un restaurante italiano con servicio a la carta y una cafetería.
-¿Qué tal la experiencia?
-Espectacular. De hecho, estamos buscando locales singulares para que puedan caber estos proyectos. La experiencia es magnífica. Entre los tres crean unas sinergias increíbles y das cobertura a toda la franja diaria.
-¿Cuándo se creó Benfood y por qué?
-Fue hace seis años. Movemos volúmenes muy importantes de compra y la distribuimos por toda España. Y se daban casos, en ocasiones, en que quizá podíamos tener rotura de estoc porque el proveedor no estaba preparado para servirnos. Por eso se tomó la decisión de que todo se hiciese en casa. Se hizo una inversión muy importante para la fábrica, de 20 millones de euros, y ha sido una de las mejores inversiones que se ha realizado en este grupo.
-Hasta el punto de que estáis ampliando negocio en ese sentido…
-Así es. Desde hace un año y medio desde Benfood no solo suministramos a nuestros restaurantes, sino que tenemos una línea de clientes terceros, entre los que están Makro, Sodexho y de restauración organizada.
-¿Pensáis seguir creciendo en este sentido?
-Si. De hecho, esta línea de la venta a terceros ha crecido durante el último año un 48% y este año tendrá un crecimiento del 80%. Vamos sumando clientes.
-Todo esto, además de multiplicar la facturación también incrementa la plantilla, ¿es cierto?
-Por supuesto. A día de hoy tenemos, repartidos por toda España, 1.300 trabajadores, y aquí en Castellón, en nuestras instalaciones de Benfood, unos 120 trabajadores, otras 40 personas en sus oficinas y en las instalaciones de la sede central unas 35 personas.
-Os habéis convertido en un gran actor de la restauración en España…
-Empezamos a ser un player importante dispuesto a competir con los principales operadores que hay en España. No contamos todavía con un gran número de establecimientos, pero nuestra facturación sí es relevante. En la división de restauración facturamos 60 millones de euros.
-De los resultados, ¿cuánto se destina a inversiones propias?
-Hemos mejorado muchísimo los resultados, no solo por el volumen de facturación, sino también por la profesionalización que ha vivido la compañía, que ha ayudado a mejorar nuestro Ebitda. En cuanto a las inversiones, todo el Ebitda va para ello. Lo reinvertimos todo en busca del crecimiento.
"Hemos tenido varias ofertas de grupos inversores y los socios no se plantean vender. desde castellón es desde donde se van a seguir tomando todas las decisiones"
-Tastia Group es un grupo totalmente castellonense, pero ¿se plantea trasladarse a otro lugar?
-Hemos tenido varias ofertas de grupos inversores para comprar el grupo y los dos accionistas no se lo plantean. En cuanto a cambiar la sede, desde Castellón es desde donde se van a seguir tomando todas las decisiones. No hay ningún interés en cambiar. Los dos socios son de aquí y quieren seguir aquí.
-A más largo plazo, ¿qué retos afrontará el grupo?
-Nuestro objetivo es que la división de restauración llegue a los 100 restaurantes en cinco años. Sobre todo estando muy centrados en el mercado nacional. Cuando tengamos una base sólida de restaurantes en España, entenderemos que podemos dar el salto internacional. En nuestra hoja de ruta no está sacar fuera la compañía, preferimos tenerla muy asentada aquí.
