VALÈNCIA. Los hoteles lideran la inversión inmobiliaria en la Comunitat Valenciana acaparando el 37,4% del volumen total en los primeros seis meses del año. Un periodo que para la región valenciana no fue positivo registrando un desplome de las inversiones en activos inmobiliarios del 55% respecto al mismo periodo del pasado año, según el último informe de BNP Paribas Real Estate que, en cambio, apunta a un crecimiento del 19% a nivel nacional hasta alcanzar los 5.000 millones de euros.
Este repunte en España viene motivado por el dinamismo empresarial en Madrid y Barcelona, especialmente en el sector de las oficinas que en el segundo semestre concentró una inversión acumulada de 2.595 millones de euros, un 13% más que en 2018. Solo en Cataluña se registró un volumen de 621 millones en el segundo trimestre en edificios de oficinas con operaciones tan importantes como la compra la adquisición de Torre Diagonal 00 por parte del grupo filipino Emperador por 150 millones de euros, la adquisición por parte de Starwood de un portfolio de activos en Madrid y en Barcelona o la venta de Torre Auditori al fondo Aberdeen Standard Invest por 98 millones de euros.
Por el contrario, en la Comunitat se ha frenado el mercado de la inversión inmobiliaria. Así, en el primer semestre de 2019 se registraron operaciones por valor de 235,7 millones de euros, frente a los 525,1 millones del mismo periodo en 2018, con poca actividad en el sector de las oficinas que representó el 16,12% del total de la inversión con 38 millones de euros.
Fueron los hoteles los que coparon el mayor volumen inversor en la Comunitat Valenciana con 88,3 millones de euros, el 37,4%, aunque casi la mitad del montante proviene de la compra del hotel Meliá Valencia por parte de Atom por unos 42,3 millones de euros y la compra de una cartera de siete hoteles en Benidorm y Málaga por parte de Azora.
Por su parte, el retail sigue despertando interés con transacciones por 60,5 millones de euros en la región, mientras que el mercado logístico registró un volumen por valor de 48,9 millones de euros, el 20,7% del total. Según apunta el informe, el incremento del consumo privado, el auge del comercio electrónico y las rentabilidades atractivas que ofrece son las claves que explican que este tipo de activos inmobiliarios estén en el punto de mira de los inversores.
En cuanto al segundo trimestre del año, en la Comunitat Valenciana el esfuerzo inversor repuntó respecto al primer trimestre, pero sigue estancado con respecto al año pasado. Las operaciones inmobiliarias alcanzaron los 205,7 millones frente a los 250,7 millones invertidos en 2018. A nivel nacional, la cifra se dispara hasta los 2.780 millones de euros, un 36% más, de los que 1.300 millones, el 47% del total, corresponde al sector de las oficinas.
El segundo sector más dinámico a nivel nacional fue el mercado residencial debido al buen momento del alquiler y la perspectiva de crecimiento de precios, según señala el documento de BNP Paribas, que cifra el volumen de transacciones en un valor aproximado de 470 millones de euros, mientras que la inversión en hoteles alcanzó un volumen de 400 millones, el 12% del total. De cara a los próximos meses destaca la venta de la cartera de Colonial, valorada en 420 millones de euros o la de Amazon, con un activo en el Prat de Llobregat de Barcelona, por un volumen de unos 150 millones de euros.
Por el contrario, apunta a una menor actividad en el segmento del retail a nivel nacional respecto del año pasado, con una inversión de 410 millones de euros, en donde destaca la operación récord de un local comercial ubicado en la exclusiva calle Serrano de Madrid por 59 millones de euros, 100.000 euros por metro cuadrado.
Los principales inversores son los fondos y las socimis que siguen copando la mayor parte de la inversión, con un 71% del total transaccionado en lo que va de año. El margen de subida de las rentas, sumado a la necesidad de rotación de las carteras y el gran apetito de los inversores, están generando altos niveles de inversión en todos los sectores inmobiliarios, explica el documento.
De hecho, fondos extranjeros que no estaban en el país siguen buscando su oportunidad, lo que aumenta la competencia y favorece la subida de precios en el inmobiliario español.
