LA VILA JOIOSA. Los dueños del hotel Atrium Beach pelearán por finiquitar su proyecto en primera línea de La Cala de La Vila Joiosa. Todo ello después de que la providencia del magistrado del Tribunal Supremo rechazara tanto los recursos de los propietarios como del Ayuntamiento, tal y como se dio a conocer este miércoles. Así, la mercantil presentará un recuso de amparo ante el altro tribunal para que se tenga en cuenta su exposición de motivos y evitar la demolición de parte del edificio no legalizable.
A día de hoy, la situación es la siguiente. El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana decretó en su sentencia de 2017 la demolición de parte de la obra y anulaba las licencias otorgadas por el Consistorio para la obra del hotel así como su ampliación.
La última providencia del Tribunal Supremo rechaza los recursos de casación por no verlos justificados. Pero aún le queda a la empresa Hotel Luna –del mismo grupo que Magic Costa Blanca– la posibilidad del recurso de amparo. Desde la propia mercantil aseguran que el último documento judicial es un mero trámite y seguirán peleando por que les den la razón.
Por su parte, el Ayuntamiento está a la espera de recibir la misma notificación para posteriormente estudiar con los asesores jurídicos cuál es la estrategia a seguir, tal y como apuntó a este diario el alcalde de La Vila, Andreu Verdú.
Los hechos se remontan a la época dorada del boom inmobiliario con una acelerada construcción en el litoral que marcó una época en España. Las licencias fechadas en 2006 y 2007 que fueron anuladas por el TSJ hacen referencia a un segundo Plan de Reforma Interior y Mejora (PRIM) con el fin de legalizar el exceso de edificabilidad. El magistrado asegura que se trataba de una modificación del primer PRIM que había sido anulado en su momento por el Tribunal Supremo.
Por otra parte, el juez considera que de esta manera no estaban primando el interés general porque la finalidad tenía como única consecuencia dar legalidad a una "grave ilicitud". En esos años, la normativa valenciana permitía legalizar estas supuestas irregularidades, eso sí, tenían precisamente que justificar que era de interés para la población el resultado de lo que allí se legalizaría, algo que para el magistrado no consiguió la administración local.
El procedimiento judicial sigue su curso y desde la mercantil lo tienen claro: están sufriendo acoso contra el proyecto por parte del ex concejal que llevó el caso a los juzgados, Pedro Lloret, "desde el año 2004, interponiendo desde entonces más de una veintena de contenciosos que han dado lugar a otros tantos procedimientos judiciales en diferentes instancias", recuerdan en un comunicado.
La empresa siempre ha defendido la legalidad de dichas obras, recordando que en primera instancia se les dio la razón y otro fallo en el que avalaban la legalidad de las licencias.
En su momento, el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 3 de Alicante dio la razón al Consistorio ante la querella interpuesta por Lloret, en la que denunciaba que las licencias urbanísticas al complejo hotelero debían declararse caducadas. El juez señaló que para decretar la caducidad de una licencia debe existir "voluntad expresa" del promotor de abandonar o desistir del derecho a edificar, pero en este caso la empresa "evidenció inequívoca voluntad de no abandonar la obra ni el proyecto de construcción".
Para concluir el comunicado, manifestaron que "el Hotel Luna S.L. se mantiene firme en su propósito de hacer lo máximo posible, siempre desde el respeto a la ley y a las decisiones de los tribunales, para conseguir el más moderno, innovador y vanguardista hotel resort de última generación, con el objetivo principal de generar riqueza en el municipio de La Vila Joiosa (el hotel podrá recibir hasta un millón de clientes al año), y facilitar la creación de hasta 2.000 puestos de trabajo directos e indirectos".