ALICANTE. Quizás por la valentía de sus pacientes afectados, quizás porque un grupo político, en este caso, Compromís, haya decidido denunciarlo ante la Fiscalía, ya queda poco para conocer más detalles de cómo eran los trapicheos de Juan Carlos Vázquez Suárez, más conocido como el Doctor Vázquez, que aprovechaba los planes de choque de la Conselleria de Sanidad para desviar a sus pacientes del Hospital General de Alicante, del que era jefe de la unidad de Neurorradiología Intervencionista- a una clínica privada. Y por qué lo hacía? Pues para hacer caja, como han denunciado los afectados y diputados de Compromís Fran Ferri y Marián Campello. ¿Y cómo recaudaba? Pues a través de una sociedad, conocida como Dagda Platinum SL, que estaba a nombre de testaferros primero y de su hija, después, con la que facturaba a la Conselleria de Sanidad. La sociedad por su parte, alquilaba un quirófano al Hospital Medimar, en la actualidad del grupo Vithas, y allí prestaba los servicios que posteriormente le cobraba a la Generalitat Valenciana.
Y esa rueda viciosa, la de desviar a sus pacientes a la clínica privada aprovechando el Plan de Choque de la Conselleria de Sanidad, se prolongó desde 2006 hasta 2013 -en 2012, una inspección interna detectó las irregularidades- hasta que el galeno fue expedientado, al parecer, por no tener la compatibilidad para ejercer, al mismo tiempo, en la pública y en la privada. El expediente acabó con sanción y el Doctor Vázquez ejerce ahora en Bélgica al estar suspendido e inhabilitado por el Colegio de Médicos tras la sanción impuesta por las autoridades sanitarias.
Pero además de vulnerar la práctica administrativa -por no tener compatibilidad para ejercer en la privada- el doctor abusó de la práctica médica, pues realizó un total de 1.246 intervenciones en total a 86 pacientes, en ocasiones injustificadamente, según han advertido los propios pacientes. Y a precios de oro: 4.000 euros la primera operación, las siguientes, hasta 3.500 euros, según la documentación aportada por Compromís. A la mayoría de los pacientes se les hicieron cinco intervenciones y la cantidad facturada fue de 23.000 euros por cada uno.
Una de las pacientes, Katia, presente en la comparecencia de esta martes, donde se denunciaron los hechos, fue quien alertó de todas las anomalías. Según ha explicado, el doctor Vázquez les operaba de malformaciones arterio-venosa cerebral, patología que consiste en una atomización de vasos sanguíneos en el cerebro y que para reducir esa acumulación y poder acudir a una cirugía, se aplica un método de "embolización" por el que, mediante un pegamento sanitario -'Histoacryl'-, se reduce esa malformación.
Con ese método se actuó sobre 86 pacientes, algunos derivados desde hospitales como Elda, Elche, Sant Joan d'Alacant o Orihuela. Algunos de esos pacientes se sometieron supuestamente a 66 'embolizaciones'. Sin embargo, y según informes de los colegios de médicos, no es aconsejable realizar más de seis y que la media sobre un único paciente es de tan solo tres 'embolizaciones'. Pero, con ello, el doctor Vázquez seguía engrosando las cifras de facturación de la empresa Dagda Platinum, en aquel momento, administrada por Alberto Joaquín Serrano Martínez, y posteriormente, por su hija, Ángeles Vázquez Carballeira. El galeno tuvo vinculación con la sociedad hasta 2004.
Tras varias sesiones, Katia sufrió una hemorragia en 2009 y fue atendida por un médico de urgencias del General de Alicante. Ante un historial vacío de imágenes sobre la evolución de su caso, se pusieron en contacto con el hospital Medimar, del grupo Vithas, pero el centro privado alegó que carecía de las imágenes de su malformación porque había borrado, por falta de espacio, en el disco duro donde se almacenaban.
"Es muy llamativo", ha señalado la diputada Marian Campello que ha detallado que la malformación de Katia no media un centímetro, como le había indicado su médico, sino 5,4. "Esto deja muchas dudas sobre el tipo de tratamiento que estaba haciendo este señor y si lo estaba haciendo, porque no hay constancia de las imágenes", ha continuado.
Después de todos estos testimonios y de la documentación exhibida, Compromís ha anunciado que llevará el caso a la Fiscalía, y que en las Cortes Valencianas presentará una Proposición No de Ley en la que se insta a crear un nuevo protocolo que establezca una comisión de seguimiento sobre los casos derivados a la sanidad privada; que se garantice el seguimiento por equipos multidisciplinares de cada caso; establecer medidas para adjuntar la historia clínica de cada paciente; aumentar el presupuesto público para luchar contra las listas de espera; y crear un grupo de trabajo que detalle los errores generados en el plan de choque. Desde la coalición han lamentado que esa situación solo se ha podido generar cuando "hay un sistema preparado para saquear a las arcas públicas" y que se pueda "traficar" con los servicios básicos de las personas como la Sanidad.