ALICANTE (EFE).- La compañía aérea Norwegian ha anunciado que reabrirá el próximo 28 las bases operativas de Alicante y Málaga, donde temporalmente tendrá una actividad de dos aviones.
Según ha informado la aerolínea, en las bases de Alicante y Málaga se mantendrá el empleo para 234 trabajadores aunque se les aplicará un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) hasta abril de 2022, cuando Norwegian calcula que pasará de la actividad actual de dos aviones a seis aviones en ambas bases.
Por otro lado, la compañía reducirá su plantilla en España entre 817 y 975 trabajadores, según las distintas cifras que manejan empresa y sindicatos, tras alcanzar un acuerdo con los representantes de los trabajadores, por el que la aerolínea de bajo coste mantendrá su actividad en España.
Según los datos de la empresa, tras "limpiar" las cifras de empleados (por situaciones de excedencias y bajas anteriores, entre otras razones) la plantilla en España estaba compuesta por 1.249 personas, de las que saldrán mediante el expediente de regulación de empleo (ERE) 817.
Las cifras que manejan tanto el Sepla, en representación de los pilotos, como USO, en nombre de los tripulantes de cabina de pasajeros (TCP), sitúan la plantilla en 1.406 personas y los despidos suman 975.
En lo que sí coinciden las dos partes es en que se mantendrán un máximo de 434 trabajadores, después de reducir el ERE en 216 personas sobre los planes iniciales de la compañía nórdica de bajo coste. De ellos, 200 son TCP y los 16 restantes, pilotos.
Tras este acuerdo, Norwegian ha confirmado la noticia de la reapertura de las bases de Alicante y Málaga. Además, la aerolínea ofrecerá hasta 200 recolocaciones, con contratos noruegos, fijos e indefinidos, para los TCP en su base de Oslo (Noruega), con una compensación económica por traslado y garantía de empleo, aunque no conoce todavía cuántos aceptarán.
Los trabajadores incluidos en el ERE tendrán una indemnización por despido de 30 días por año trabajado y una bolsa de empleo que será regulada por antigüedad. La adscripción al ERE será inicialmente voluntaria, como primer criterio, y forzoso, hasta cubrir el expediente.
El acuerdo incluye también el abono de un complemento a la prestación por desempleo durante los periodos del ERTE y el compromiso empresarial de no recurrir a tripulaciones de bases extranjeras para realizar producción española mientras haya trabajadores en un ERTE.
Un 80 % de los pilotos han ratificado, según el Sepla, el acuerdo que alterna 6 meses de suspensión de contrato con tres meses de jornadas reducidas hasta el verano de 2023. Incluye también la reducción de la jornada laboral y del salario de este colectivo en un 80 % durante los meses de actividad.