VALÈNCIA. La televisión autonómica valenciana consiguió en 2021 mejores audiencias e ingresos que el año anterior, pero empeoró su resultado económico, sin contar los extraordinarios provocados por las actas de la Agencia Tributaria en el controvertido asunto del IVA de las televisiones públicas, que distorsionaron las cuentas de resultados de los dos últimos años.
El grupo Corporació Valenciana de Mitjans de Comunicació (CVMC), cerró el año con unos ingresos de 2,25 millones de euros, un 39% más que el año anterior y las pérdidas consolidadas, sin contar las subvenciones para el servicio público no incorporadas a resultados, ascendieron a 70,98 millones.
Para compararlos con los de 2020, hay que restar los 58,02 millones de subvención para el servicio público que presta À Punt y los 8,63 millones provisionados por el IVA reclamado por la Agencia Tributaria en la disputa legal que mantiene con la televisión autonómica. Así, el resultado, restando el servicio público y la distorsión por el contencioso con Hacienda, sería de unas pérdidas de 4,33 millones de euros en 2021, frente a los 0,87 millones del año anterior (antes de que se modificasen por el contencioso con Hacienda). En 2019 las pérdidas después de subvenciones ascendieron a 11,69 millones.
Respecto a las actas por impago de IVA entre 2016 y 2019, levantadas a mediados de 2021 y recurridas por la CVMC, el ente público decidió computarlas como pérdidas por dotación -33,4 millones- en el ejercicio 2020, por lo que reformuló las cuentas una vez aprobadas por la Intervención General y publicadas dentro de la Cuenta General de la Generalitat. Además, modificó en la cuenta de resultados la cifra de consumo de mercaderías, que había sido cuestionada por el auditor.
Así, las pérdidas totales en 2020 -sin descontar la subvención de 56,02 millones- pasaron de los 56,89 millones que reflejaban las cuentas presentadas y que aún están colgadas en la Cuenta General de ese año, a 87,4 millones, según consta en la comparativa de la cuenta de resultados de 2021 con el ejercicio anterior.
Fondos propios negativos
Como consecuencia de las pérdidas provocadas por estas dotaciones, los 33,4 millones de 2020 y los 8,63 millones de 2021, los fondos propios de la CVMC entraron en negativo ya en 2020, tras la reformulación de cuentas, con -3,75 millones. A 31 de diciembre de 2021 los fondos propios del ente público ascendían a -16,72 millones, lo que posiblemente obligue a la Generalitat a aumentar el capital.
Si finalmente el ente que preside Mar Iglesias lograse derrotar en los tribunales a la Agencia Tributaria y no tuviera que pagar ese IVA o le devolviesen el ya pagado, esas cantidades se liberarían figurarían como beneficios en la cuenta de resultados del año en que esto ocurriese.
Las Fallas de septiembre, récord de audiencia
Según destaca en su memoria anual la televisión que dirige Alfred Costa cerró 2021 con sus mejores datos históricos, con una cuota de pantalla de un 3,4% y 25.000 espectadores de media, que ascienden a 643.000 espectadores en audiencia media acumulada. La cuota de la autonómica crece un 13% respecto a 2020 (3,0%).
El mejor día para À Punt fue el 5 de septiembre, con un 6,2% de la audiencia (44.000 espectadores), coincidiendo con el fin de fiesta de las Fallas celebradas en la primera semana de septiembre, que, según la televisión pública, congregaron a un millón de espectadores. Por programas, el top 10 lo encabezan L'Alquería Blanca y Notícies Migdia.
El auditor repite salvedades
Al igual que en el ejercicio anterior, el auditor de las cuentas de la CVMC cuestiona en su informe la forma de contabilizar la compra de programas -en contra de un informe de la Conselleria de Hacienda, que la Corporació justifica por las "prácticas del sector"- y afirma que "se está realizando una interpretación errónea" de la normativa en vigor. Añade que la sociedad no ha justificado los porcentajes de consumo de contenidos, pero no dice cuánto podrían variar los resultados porque no ha podido obtener información para cuantificar el efecto que tendría en las cuentas la contabilidad que considera más ortodoxa.