MADRID (EP). ACS ha ganado 95 millones de euros brutos al renovar los contratos de derivados que tiene suscritos sobre el 1,4% de Iberdrola que aún tiene el grupo, un porcentaje que a su vez está ligado a las emisiones de bonos convertibles en acciones de la eléctrica que la constructora lanzó en 2013 y 2014.
Con esta operación, además de lograr dicha ganancia, la compañía que preside Florentino Pérez "reduce significativamente el riesgo de mercado y de oscilación de precios" sobre esta participación que le queda en la eléctrica, en la que en 2010 llegó a tener un 20% como primer accionista.
En concreto, ACS ha cerrado el contrato de derivados que tenía suscrito sobre estas acciones de Iberdrola, un paquete de 89,98 millones de títulos.
La operación se ha realizado a un precio medio de 6,02 euros por acción, importe un 3,1% superior al del cierre de la eléctrica en Bolsa este lunes (5,838 euros por título).
En paralelo, ACS ha realizado con dos entidades financieras dos nuevos contratos de adquisición de opciones de compra sobre estas mismas acciones.
Uno de los contratos, que afecta a 52,90 millones de títulos de Iberdrola, representativos del 0,82% de su capital, se ha firmado con vencimiento en el último trimestre de 2018.
El otro contrato, firmado sobre 37,09 millones de acciones equivalentes a otro 0,57% de la eléctrica, vence en el primer trimestre el 2019, según detalló ACS a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
De esta forma, los nuevos contratos de derivados hacen coincidir su vencimiento con el de las emisiones de bonos que ACS lanzó a finales de 2013 y comienzos de 2014, títulos de deuda que a su amortización son canjeables por estas acciones de Iberdrola.
Al cierre de 2015, dichas emisiones de bonos presentaban un saldo vivo y pendiente de amortizar de 297,60 millones de euros y 235,30 millones de euros, respectivamente, según consta en el informe anual de ACS.
El grupo de construcción y servicios renueva los derivados sobre el 1,4% de Iberdrola ligado a estos bonos después de que a comienzos del pasado año liquidara los contratos de 'equity swap' que tenía sobre otro paquete de títulos de la eléctrica representativos del 2,5% de la eléctrica.
Una vez que se amorticen los bonos de ACS actualmente en circulación, mediante su canje por títulos de Iberdrola, la constructora saldrá definitivamente del capital de la eléctrica en la que entró en 2007 y en la que en 2010 llegó a sobrepasar la cota del 20%. Entonces, sopesó incluso promover una fusión con la entonces Unión Fenosa, en cuyo capital también estaba la constructora presente por esas fechas.
Posteriormente, tras acudir a los tribunales con el fin de que dirimieran su eventual derecho entrar en el consejo de Iberdrola, ACS optó por ir deshaciendo paulatinamente posiciones en la eléctrica. La actualidad participación residual ligada a los bonos está catalogada como activo disponible para la venta.