Se nos va uno de los templos del producto junto al mar, Vinícolas de Raúl Aleixandre, tras cuatro años de buena cocina cerró sus puertas el pasado 15 de abril.
VALÈNCIA. Se nos ha ido uno de los templos del producto junto al mar que, todo sea dicho, tuvo mejor arranque que ejecución. El restaurante Vinícolas, de Raúl Aleixandre, bajó la persiana el pasado 15 de abril. Por el momento aún se desconoce si alguien volverá a tomar las riendas del proyecto gastronómico, del que el cocinero se ha deshecho con pena, pero también con la promesa de regresar. No habrá más ortiguillas, buñuelos, croquetas o rossetjats comandados por uno de los primeros nombres de la gastronomía valenciana.
Antes de desembarcar en La Marina de València, el periplo de Aleixandre por la ciudad ya era una historia de victorias. Imposible olvidar el tránsito por Ca'Sento, que fue durante una época el mejor restaurante de la Comunitat, además del pionero en ostentar una Estrella Michelin. Raúl también ganó el Premio Nacional de Gastronomía en 2004.
Fue en 2014 cuando se trasladó a la orilla del mar. El matrimonio con la empresa alicantina Vinícolas, responsable de las referencias que se servían en las copas, le llevó a emprender un nuevo proyecto en el entorno de la Marina. La oferta siempre ha pasado por el recetario autóctono, pero eminentemente marinero. Ahora habrá que seguirle la pista para avistar sus nuevos horizontes, ya que allá donde se encuentre, habrá buena cocina.